Series que terminan en 2019

Series que terminan en 2019

Ya comienza a ser una tradición por estas fechas, el hacer un artículo sobre aquellas series que tienen los días contados en la parrilla televisiva, algunas más conocidas y otras no tanto, pero que seguro sus fans notarán su ausencia, para bien o para mal. Quiero recordar, que en este post están incluidas las que yo sigo y que han confirmado su final antes de esta publicación, además de alguna que ya ha terminado pero que también seguía. Seguramente, falte alguna más que termine su camino este año pero que no veo, así que disculpad de antemano si me dejo alguna, pero siempre podéis escribir en los comentarios sobre las series que no estén a continuación. Y, por supuesto, no están aquellas que vayan a ser canceladas en los próximos meses, o incluso vayan a terminar su camino con normalidad, si no han anunciado antes su final. Dicho esto, vamos con el recopilatorio de este año.

Unbreakable Kimmy Schmidt

Es la única serie del listado que ya ha concluido su viaje. La comedia de Netflix se despidió en enero tras una táctica que empieza a ser habitual en las diferentes cadenas y plataformas televisivas, dividir su año final en dos tandas, que unas veces sale mejor y otras peor. Personalmente, creo que esta vez se corresponde al segundo caso, dado que los seis primeros capítulos de su cuarta temporada fueron mucho mejores que los siguientes, estrenados hace unas semanas. Con todo, creo que hemos despedido a una de las comedias más alegres y especiales de los últimos años. Bajo mi punto de vista, hay pocas ficciones que han sido capaces de transmitir ese buen rollo y esa positividad como lo logró la ya finalizada serie de Netflix. Además, el personaje de Kimmy Schmidt es uno de los mejores personajes de comedia que ha producido la televisión, in my opinion. Ya sabéis, si queréis pasar un rato agradable y desconectar de tanto drama, esta serie es la vuestra. Ah, y no paséis el opening bajo ningún concepto; no me fío de los que no tararean la canción irremediablemente cuando comienza a sonar la sintonía.

Easy

Nunca conecté con esta serie. No tengo muy claro si la comencé a ver porque soy suscriptor de Netflix, y la facilidad a la hora de acceder a los contenidos no me hizo pensar mucho; por la búsqueda continua de comedias con las que rellenar espacios de tiempo más reducidos que la mayor parte de ficciones no pueden ocupar, al ser de duración más extensa; por el simple aburrimiento de una tarde cualquiera de la estación del año que queráis; o todo a la vez y más factores que ahora mismo no soy capaz de traer a colación. En cualquier caso, esta comedia terminará su andadura tras tres temporadas, en las que me cuesta encontrar algún episodio memorable. Es entretenida, pero realmente no la recomendaría nunca. Salvo si quieres ver algo distinto en cuanto al género de comedias románticas se refiere, y puede que ni aún así. Hay muchas series mejores que Easy dentro de este estilo de ficción (por ejemplo, también en Netflix, Master of None, aunque abarca más temas que el amor) por lo que, por mi parte, no la voy a echar de menos cuando se acabe. No tenemos fecha de lanzamiento por ahora.

You’re the Worst

En este caso, me adelanté el año pasado al incluirla en el especial respectivo de 2018. En mi defensa, sabía que iba a terminar, pero no había anunciada fecha, por lo que bien podría haber iniciado su viaje final el año pasado. Su temporada final está actualmente en emisión, y me voy a remitir a lo dicho hace unos 365 días antes:

Ésta sí que es anti San Valentín total. El producto de FXX es una sátira ácida (y vulgar en muchas ocasiones) de lo que suponen las relaciones, comandada por dos personajes que son absolutamente tóxicos y cuyo interior está más podrido que una fruta pasada, pero que sin embargo son capaces de encontrar el amor… o lo que ellos creen que es amor vaya. Esta comedia (que también roza el drama muchas veces) da por finalizada su trayectoria en este 2019 con su quinta temporada, y para ser sinceros, creo que es otro de esos productos que merece la pena echar un vistazo, sobre todo si estás harto de tragarte productos sentimentaloides y edulcorados que hacen que te suba el azúcar. El humor de You’re the Worst quizá no sea para todo el mundo, pero solo por ver lo perturbados que están todos y cada uno de sus personajes, creo que merece la pena darle una oportunidad, encima ahora que sabéis que se va a acabar; además, sus episodios duran menos de 25 minutos, y se ven muy fácil y muy rápido. 

Transparent

Probablemente Transparent sea la ficción más importante de Amazon desde sus inicios en el mundillo televisivo, por todos los galardones cosechados durante sus años de emisión, y por el mensaje reivindicativo e inclusivo que lanzó con la historia de Maura y su lucha por reivindicar su sexualidad. El problema es que su entrega final va a llegar deslucida por todo el escándalo alrededor de Jeffrey Tambor, y su consecuente salida de la ficción. No contaremos con el mejor personaje de largo de la serie, y eso para mí es un problema, porque el resto de elementos de la ficción nunca me han convencido, y por elementos me refiero a la familia de Maura, que en muchas ocasiones me resulta insoportable. Imaginar una temporada final solo con todos ellos me tira mucho para atrás, pero imagino que por el maldito completismo (y porque la siguiente será la última temporada) terminaré viéndola. Transparent tiene un ejemplo en House of Cards de lo que no hay que hacer en una entrega final en la que tu protagonista y principal pilar está ausente. Sinceramente, creo que la falta de Maura será tan importante como la de Frank, y si es así, nos espera una despedida amarga para una de las ficciones más especiales que hemos tenido en la televisión de los últimos años.

Veep

Realmente Veep tuvo que haber terminado el año pasado, pero el maldito cáncer, una de las lacras de nuestro tiempo, mantuvo a Julia Louis-Dreyfus alejada de los focos durante un tiempo de convalecencia, pero no ha evitado que pudiera grabar, por última vez, las locuras de un personaje tan divertido como especial como es Selina Meyer. HBO anunció recientemente que su temporada final comenzaría el próximo 31 de marzo, por lo que nos queda bien poco para despedirnos de todo el séquito de la presidenta Meyer, y del particular sentido del humor que caracteriza esta comedia, tan distinta de la habitual y manida sitcom clásica. Satirizando de maravilla la política estadounidense en un tono desenfadado y atrevido, Veep ha estado en la mayoría de listas de mejores series de cada año, y por méritos propios, además de haber sido galardonada su protagonista en numerosas ocasiones, por su rol en la ficción. No sé qué esperar de la marcha de una de las mejores comedias de los últimos años, pero tengo claro que no dejará indiferente a nadie, y creo que estará a la altura de las circunstancias.

The Deuce

Todo seriéfilo que se precie debería ver algún producto de David Simon. O dos. O incluso todos los que este hombre ha ido creando con el paso de los años. The Wire es una obra maestra de la televisión, y casi de visionado obligatorio para todos aquellos consumidores de series, salvo si no te gusta ese género en concreto. Pero es que ni aún así. Siempre se le debería dar una oportunidad a Simon, siempre. Con The Deuce pasa igual. A través de esta historia sobre la incipiente industria del porno en la América de los años 70, Simon aprovecha para introducir temas como el machismo, feminismo, crítica social, crímenes varios… vamos, todo un cóctel de asuntos que estaban presentes en esos días y, por desgracia, también actualmente. Lo mejor de la ficción son el papel que tienen todas las actrices, y en especial el de Maggie Gyllenhaal, de la que hemos hablado hace unos meses en nuestra sección Spammers del Mes. Estáis todavía a tiempo de poneros al día con una de las series más interesantes de los últimos años, que de momento no tiene fecha de estreno confirmada, aunque viendo los antecedentes, yo no la espero hasta finales de agosto o durante septiembre.

Mr Robot

Mientras escribo estas líneas, todavía no he visto la tercera temporada de Mr Robot, únicamente su primer episodio. Eso no quita que, cuando vaya a empezar su cuarta temporada (se desconoce la fecha de estreno de momento), no esté al día y haya visto los episodios pendientes. Este caso es similar al de Legion (del que luego os hablaré): una primera temporada que asombró, y una segunda que aburrió hasta las ovejas, y se perdió en su propio laberinto de rareza que construyó desde su piloto. De la tercera no puedo hablar. Al parecer, es mejor que su predecesora, incluso mis compañeros destacaron uno de sus capítulos como uno de los mejores del 2017, en el recopilatorio que hacemos anualmente. ¡De los mejores capítulos! Mi sorpresa fue mayúscula al verlo en el listado, ya que mi fe en Mr Robot nunca fue como la de muchos. Su entrega debut me gustó, pero no me fascinó tanto como a la mayoría de sus seguidores, y también me quedaba la sensación de que esta serie era altamente maleable, si transcurría por cauces más rocambolescos todavía. El tedio se apoderó de la ficción y, utilizando jerga «pokémonil», estaba tan confusa que se hirió a sí misma. Tengo suerte, porque su tercera entrega puede hacerme cambiar de opinión mientras deciden lanzar la cuarta temporada… o no. Si es para bien, llegaré con ganas al estreno; si es para mal, lo mismo me tiro otro año y medio para ver la conclusión de una serie que nunca llegué a amar, y que siempre le he encontrado más peros que cosas a destacar.

Jane the Virgin

Aquí donde la veis, Jane the Virgin puede presumir de ser la única serie de The CW que tiene un Globo de Oro. Su año de estreno le sirvió para llevarse la estatuilla a la mejor actriz en comedia para Gina Rodríguez, y eso le abrió las puertas para consolidarse como una de las comedias más frescas y divertidas del panorama televisivo actual, y que yo personalmente más disfruto semana tras semana. Lo entrañable de sus personajes, el buen rollo que transmiten, las tramas rocambolescas al más puro estilo telenovela, abrazando ese género y llevándolo muchas veces a lo disparatado, no sin las correspondientes dosis de drama que tanto lo caracterizan, forman un cóctel la mar de interesante y que te deja la sensación de haber visto mucho en los cuarenta minutos de duración que tienen sus episodios. Todo ello aderezado con los comentarios del narrador que, además de ir narrando lo que va sucediendo, aporta su punto de vista y prácticamente es un espectador más que va viviendo lo que le va pasando a Jane y compañía. El día 27 de marzo es el elegido para arrancar su temporada final, y espero con ansias la resolución de la historia, y espero que tenga el final más feliz posible.

The Affair

La trayectoria de The Affair ha sido cambiante con el paso de los años. Tras una entrega debut bastante buena, tuvo una segunda que cumplió con aquello que le solicitaba en su primer año, ampliar la perspectiva a más interlocutores de esa historia de amor prohibido que nos presentaron en su primera temporada. Lo hicieron y, para mí, nos ofrecieron episodios de auténtico lujo (como por ejemplo el 2×09), pero tras ese año de mejoría, vino uno de caída en cuanto a calidad se refiere, y las dudas comenzaron a asolar al seguidor de la serie, preguntándose si quizá no iba siendo hora de darle el punto y final al producto de Showtime. No obstante, su entrega del año pasado se convirtió en una de las mejores series del verano, in my opinion. No en vano, la incluimos tanto en julio como en agosto en nuestra sección Lo Mejor del Mes, y uno de sus protagonistas, Joshua Jackson, fue elegido por nuestros seguidores de Twitter como el mejor actor del mes de agosto, en nuestro apartado Spammers del Mes. Con todo ello, se avecina una entrega final en la que surgen muchas incógnitas, dado que dos de los cuatro protagonistas principales (o al menos uno) no estarán, y la pregunta que nos queda hacer, al margen de qué se traen entre manos, es si serán capaces de concluir este affaire de la manera más satisfactoria posible. Todavía no tenemos fecha de estreno.

iZombie

Creo que The CW pierde en cuestión de unos meses, dos de sus ficciones más interesantes y que hacían de la cadena algo diferente, en la que podíamos encontrar, al margen del predominio del Arrowverse y el universo The Vampire Diaries, series tan entretenidas y con un estilo tan peculiar, como en el caso de Jane the Virgin, o el que nos atañe ahora, iZombie. La ficción creada por Rob Thomas (artífice de otra gran serie como Veronica Mars) comienza su última temporada el día 2 de mayo, por lo que también nos queda muy poco para despedirnos de Liv Moore y los suyos, todos ellos al frente de una ficción zombi que dista mucho de lo habitual del género, y que mezclando casos procedimentales con una interesante trama de fondo, se ha ido ganando un hueco entre la enorme cantidad de series que sigo, y siempre era una de mis prioritarias cada semana, porque su tono y el cariño que le he cogido a los personajes durante estas cinco temporadas, hacía que prefiriera ver un episodio suyo al de cualquier otra serie. Tras una cuarta entrega que quizá no fue la mejor, espero que en esta quinta sean capaces de despedir la ficción como se merece.

Legion

Ha sido una de las últimas en unirse a este listado, ya que a comienzos de este mismo mes, se anunciaba que en junio comenzará la última temporada de esta controvertida ficción de FX, con un fichaje muy especial, que los seguidores de la misma estábamos ansiosos por ver. Aun con todo, remarco lo de controvertida, porque su primera entrega nos ofreció un nivel apabullante, pero siempre envuelta en un estilo que era muy volátil, y fácilmente maleable, si no eran capaces de hacer las cosas bien; es decir, se veía venir que si la cosa se iba (mucho más) de madre, podíamos acabar todos en el psiquiátrico en el que David comienza la serie. Y para desgracia de Legion y los que la hemos seguido, la segunda temporada acabó siendo un despropósito, de principio a fin. Tras una primera entrega con ocho episodios, se aumentó a once (siendo diez en un primer momento, pero se agregó otro más al inicio de la emisión de la temporada), con la consecuente introducción de relleno, que claro, en otras series hasta sería interesante, pero aquí no dejaban de ser más pajas mentales que otra cosa, tramas sin sentido alguno, y creo que todo lo que nos maravilló en su temporada debut, nos aburrió sobremanera en la siguiente. En 2019 nos despediremos de ella, con la incógnita de si van a ser capaces de redimirse, y ofrecernos una última entrega digna, o si sucumbe al caos que ella misma construyó, y se va sin pena ni gloria del panorama televisivo.

Orange is the New Black

Si no me equivoco, junto con House of Cards, Orange is the New Black fue la pionera en Netflix en materia de producción televisiva propia. Esas dos (y no recuerdo si alguna otra más) fueron las que hicieron que la plataforma pasara a emitir ficciones completamente suyas, y abrieron el mercado a la actual realidad, donde las plataformas streaming producen series como churros. En el caso de House of Cards, su despedida fue agridulce, ya que todos los escándalos alrededor de Kevin Spacey deslucieron una entrega final que quiso redimir a una serie que no vivía su mejor momento, y tampoco lo consiguieron con Robin Wright liderando el proyecto. Sin embargo, Orange is the New Black (pese a no ser santo de mi devoción) creo que tendrá una mejor despedida, porque aun teniendo años malos, creo que pesan más en la balanza los años buenos, y tras una sexta temporada que me gustó bastante (incluida además en nuestro especial anual), su séptima entrega puede servir para cerrar las tramas y despedir a las presidiarias que hemos conocido durante todos estos años y que nos han conquistado con sus historias porque, ante todo, son personas, cada una con sus preocupaciones y dramas personales. Y eso ha sabido transmitirlo de maravilla esta serie, que empezaba con una Piper Chapman ingresando en prisión voluntariamente, pero que acabará haciendo que los espectadores estén más pendientes de lo que les sucede a todas esas mujeres que nos han ido presentando durante sus siete temporadas, que de lo que le pase a la protagonista. No tenemos fecha de lanzamiento oficial, pero viendo que todas las temporadas anteriores se emitieron de cara a verano, no es arriesgado apostar por un estreno a partir del mes de mayo.

Gotham

La historia de cómo Bruce Wayne llegó a convertirse en Batman se acerca su final. Su quinta y última entrega está actualmente emitiéndose en FOX, y quedan contados episodios hasta su cierre, que si no me equivoco, coincidirá con su episodio número 100. Una cifra redonda para despedir a una ficción que ha tenido altibajos, como la mayoría de productos de network con temporadas tan extensas, pero que ha sabido mantener la tónica de entretener a sus seguidores año tras año, ofreciéndonos muchas ocasiones picos de alta calidad, que nada tenían que envidiar a otros productos de este género tan sobreexplotado en la última década. Quizá lo más interesante de todos estos años en Gotham, no ha sido conocer al joven Bruce Wayne y su conversión en el Caballero Oscuro, sino el desarrollo de todos esos villanos tan míticos del justiciero con el paso de las temporadas, además de darle más empaque a la figura de Jim Gordon, que ha hecho la serie suya, al margen del joven multimillonario. Semana tras semanas, Gotham se ha ido ganando un hueco entre las series que más ganas tenía de ver durante todos estos años, y espero que cierren por todo lo alto la historia.

Into the Badlands

Otra de las que se han unido a esta lista recientemente, porque su final fue anunciado este pasado domingo, y lo cierto es que me pilló por sorpresa. Más que nada porque creo que ha sido uno de los mejores estrenos que ha tenido AMC en los últimos años, consiguiendo confeccionar un producto de calidad, distinto, y capaz de enganchar a la audiencia, presentándonos un mundo post apocalíptico en el que las artes marciales y Mad Max parecen haberse unido, para ofrecernos una serie que se debería haber tenido más en cuenta por todos. Entre otras cosas, porque sus coreografías en las luchas son dignas de lo mejor de la industria del cine, siendo de lo más vistosas y quizá las más impresionantes a nivel de pantalla pequeña. Fue bastante curioso, porque cuando se lanzó la primera temporada de Iron Fist, allá por marzo de 2017, Into the Badlands estaba emitiendo su segunda entrega, y tras ver la ya finalizada serie de Marvel-Netflix, te ponías un episodio de la de AMC y llorabas, porque los que veíamos ambas series no éramos capaces de concebir, que un experto en las artes marciales (como se supone que es Danny Rand) tuviera unas coreografías tan penosas, y en Into the Badlands, hasta el más tonto hacía relojes, además con cualquier medio a su alcance. Comparaciones odiosas al margen, tengo esperanzas de que la serie se despida por todo lo alto en estos últimos ocho episodios (arrancan el próximo 24 de marzo) y no deje cabos sueltos. Si buscáis entretenimiento de alta calidad, Into the Badlands es vuestra serie.

Counterpart

Ha sido la más tardía en unirse a la fiesta, y será la primera en marcharse, con permiso de la ya finalizada Unbreakable Kimmy Schmidt. Counterpart ha sido cancelada esta misma semana por Starz, cadena que la lanzó el año pasado en enero y que ha decidido poner el punto y final al camino de la serie, que se emitirá mañana en Estados Unidos, y el lunes lo tendremos disponible en España. Para mí, fue uno de los estrenos más destacados del año pasado (tal y como remarcamos en el repaso anual de hace un par de meses), y su segunda temporada estaba siendo, como mínimo, tan buena como su predecesora, si no mejor. Es una auténtica lástima, porque Counterpart pasa a ser una de esas ficciones con un enorme potencial, que va a quedarse en el limbo de las series finalizadas antes de tiempo, sin merecerlo. Con un reparto de primer nivel, como pocos de los que tenemos en televisión hoy en día, nos ofrecía un relato de ciencia ficción en la que podíamos ver colisionar dos mundos tan parecidos pero a la vez tan diferentes, y el papel de un hombre corriente en todas las tramas políticas y de poder que había detrás de ese puente entre realidades. Me temo que nos dejen con un final abierto de par en par, y su prematura despedida nos deje con un sabor más amargo todavía si cabe; ojalá me equivoque.

Homeland

Soy de los que piensa que Homeland debería haber acabado hace tiempo, mucho tiempo. Creo sinceramente que la historia concluyó con Brody, allá por su tercera entrega, y que todo lo que ha venido a continuación es más un spin off que otra cosa. Carrie es la protagonista, pero la idea de esta serie era contarnos la historia de ese soldado que regresaba a casa y que había cambiado, hasta el punto de querer atentar contra su país, y los intentos de una agente de detenerlo, convirtiéndose todo esto en una historia de amor en el proceso. A partir de su cuarta entrega, se podría haber titulado “Las aventuras y desventuras de Carrie Mathison” sin problema, y aunque ha tenido años mejores y años peores, sigo defendiendo que el tiempo de Homeland debería haber finalizado hace mucho. Pero así es la vida y la industria televisiva estadounidense. Ficciones que merecían continuar y desarrollarse mucho más se fueron por el sumidero de las cancelaciones (sin ir más lejos, Counterpart), y otras que parecían agotadas, o que directamente no merecían ser renovadas, han prolongado su existencia durante años y temporadas, la mayoría me atrevería a decir, innecesariamente. Homeland está, in my opinion, en las que han sido extendidas por encima de sus posibilidades, así que raro será que la eche de menos cuando se vaya. Aún no hay confirmación oficial acerca de su fecha de lanzamiento.

The Big Bang Theory

Para mí, el formato de sitcom clásica está llegando a su fin. Sí, ya sé que en Estados Unidos tienen unas audiencias increíbles, por encima de lo que muchas veces me parece concebible, si tenemos en cuenta la calidad de estos productos. Sin embargo, CBS se empeña en seguir produciendo este estilo de ficción y procedimentales todos los años, a riesgo de darse cuenta de que, si salen de esa fórmula, pueden acabar yéndose por el sumidero con una facilidad pasmosa. Seamos sinceros, hasta dos de sus mejores productos de la última década (por no decir los mejores) como fueron The Good Wife y Person of Interest nacieron como procedimentales, y vivían de esa fórmula en muchas ocasiones. Aún con esas ficciones, CBS sigue defendiendo este estilo de televisión, y por eso no me ha extrañado la renovación continuada de una serie como The Big Bang Theory, que agotó su gracia y originalidad hace mucho tiempo. A día de hoy, me río la mayor parte de veces, no porque me hace gracia lo que dicen, sino porque creo que me contagio de esas risas enlatadas, que ya suenan rancias en el recién estrenado 2019. El espectador actual creo que no aguantaría otras doce temporadas de una serie como ésta, y el crítico televisivo actual menos. Ya iba siendo hora, y ya nos quedan menos semanas para decir adiós a Sheldon, Penny, Leonard y compañía, que están viviendo sus últimos episodios al estar emitiéndose a día de hoy su temporada final.

Game of Thrones

Y llegamos a LA despedida con mayúsculas. El día 14 de abril está marcado en rojo por todos aquellos que hemos seguido la ficción durante estos años, porque se nos va el gigante televisivo de la actualidad. Quizá el caso más parecido a lo que se va a vivir con la temporada final de Game of Thrones fue lo que sucedió con Lost, pero la ficción de HBO ha superado en todos los aspectos imaginables a la de ABC, no solo en cuanto a trama, sino también en todo lo que mueve y se genera a su alrededor. Las tramas de Poniente llegan a su final televisivo, porque tras independizarse de las novelas de George RR Martin, los lectores que además siguen la serie verán cómo acaba la historia que inició el autor estadounidense con Juego de Tronos allá por 1996. Se supone que el final será el mismo, o eso han reiterado los creadores de la ficción en numerosas ocasiones, pero el camino elegido para llegar hasta allí no ha sido el mismo, con todo lo que eso supone. Al margen de si difiere o no de lo que Martin escribirá (o eso espero) cuando cierre la saga, HBO se ha ganado el crédito suficiente para confeccionar el final que ellos crean conveniente, porque han recreado esta saga de forma única, ofreciendo un espectáculo televisivo incomparable que va a ser difícil de emular en el futuro próximo. La prueba de que Game of Thrones ha sido un hito de la pequeña pantalla es que, ahora, todas las grandes cadenas quieren encontrar su éxito que las catapulte al estrellato: Showtime va a adaptar El Nombre del Viento, Netflix tiene previsto el estreno de The Witcher este mismo año, y Amazon va a hacer lo propio con El Señor de los Anillos; incluso la propia HBO ya está preparando spin offs de la ficción para seguir nutriéndose de todo este éxito. Todas buscan obtener el rédito que ha conseguido la cadena con esta serie, y el reto de los próximos años va a ser igualar, como mínimo, lo logrado por Game of Thrones, si eso es siquiera posible. Más allá de lo que está por venir cuando finalice esta ficción, deberíamos todos disfrutar de los seis episodios finales lo máximo posible, porque no sabemos si seremos testigos de algo similar, al menos en la pequeña pantalla; quizá solo a nivel cinematográfico alguien sea capaz de igualar todo esto.