Review Loki: Ouroboros

Review Loki: Ouroboros

Hace dos años, al terminar la season finale de Loki, descubrimos que sería la primera serie de Marvel Studios en Disney en ofrecernos una segunda temporada.

Desde que vimos al príncipe segundón de Asgard por última vez, han pasado más de dos años, una decena de películas en el UCM y unas pocas series de mayor y menor éxito en Disney+. Pese a todo el tiempo transcurrido, la nueva temporada de Loki continúa en el punto exacto en que lo dejó.

Recordemos que Loki y Sylvie viajaron hasta el fin de los tiempos. Allí encontraron a «He Who Remains” (Jonathan Majors). El tipo parecía muy poderoso y daba un pelín de miedo. Era quien evitaba que la la Sagrada Línea del Tiempo se convirtiera en un multiverso total y absoluto. Sylvie mató a este tipo y expulsó a Loki del castillo del fin de los tiempos … y se desató el caos.

Loki apareció en la TVA y se encontró con una oficina completamente transformada. Había una estatua descomunal de «He Who Remains” y algunos espectadores creímos que se trataba de alguna otra realidad del multiverso. No era así, era simplemente el pasado. En ese pasado estaba Mobius (Owen Wilson) que no recordaba a Loki… porque aún no lo había conocido. De manera que la sensación de vértigo que tuvimos al final de la primera temporada con una versión de Mobius y una versión de Hunter B-15 que no recordaban su pasado junto a Loki no fue más que una pequeña trampa que ya podemos olvidar.

Loki comienza el episodio padeciendo unas extrañas crisis que lo hacen saltar en la línea temporal. Ya lo habían mostrado en el trailer. Al terminar el episodio ese asunto ya está resuelto, así que Loki no está atrapado en el multiverso, tampoco está atrapado en el pasado y además pisa el presente con pies firmes, una vez recuperado del trance de los saltos involuntarios. Pero da igual, la primera temporada ha quedado resuelta y ha sido divertido ver a Loki y Mobius pelear por curar a Loki mientras todo se venía abajo.

La premiere tiene muchas cosas positivas, es un episodio rítmico, fresco, con mucho dinamismo y repleto de diálogos con chispa. Por otra parte, también ha sido algo superficial, de guión fácil y con una nula reflexión al respecto del viaje personal de cualquiera de los personajes o del significado trascendental y de vital importancia que implican las líneas temporales eliminadas o salvadas de la eliminación; el genocidio bestial que han llevado a cabo durante tiempos inmemoriales y las repercusiones de las manipulaciones temporales en las vidas de los personajes o en el devenir general de todas las criaturas.

La serie quiere ser simple, quiere divertirnos y de forma premeditada decide pasar por alto cualquier atisbo de profundidad. Estamos en el Disney más infantil, estamos en el Marvel más comercial y huimos de cualquier cuestión de fondo. La impresión es que la premiere mantiene un ritmo frenético deliberadamente para evitar centrarse en el desarrollo de los personajes y en sus motivaciones. Para evitar entrar en consideraciones sobre el multiverso que afecten en exceso al MCU.

Personalmente me hubiera atraído otro tipo de acercamiento a la trama de esta temporada, mostrándonos las consecuencias de las acciones de la primera temporada de una forma más cruda, más arriesgada, quizás más compleja.

Pero… dicho esto, tengo que confesaros que lo he pasado de maravilla y que terminado el episodio estoy muy contenta con los McDonalds de los ochenta y con los amigos que se preocupan por los padecimientos de sus amigos aunque se les esté cayendo a trozos el mundo y estén en una realidad a punto de explotar, después de haber descubierto que toda su vida ha sido una mentira.

Hemos visto muchos momentos memorables, tanto de corte cómico como más serios. Loki sigue en su línea, Tom Hiddleston sabe otorgarle al personaje un toque digno de héroe que se cree una divinidad y que a la vez se sabe un perdedor. OB ha sido una incorporación sobresaliente y Mobius es adorable en todas sus facetas.

“We got to the man at the end of time. We thought it was about freeing the timeline, but that only brings more malevolence, more violence, more war, more of him. They’re coming; they’re all coming.”

Me ha gustado mucho que Mobius se arriesgue tanto por Loki, pensemos que le acaban de revelar un discurso alarmante, pero para Mobius no hay miedos futuros ni revelaciones del pasado (que no recuerda) que le hagan olvidar que lo más importante es recuperar a su amigo completamente. El bromance entre estos dos personajes es delicioso, me encanta la amistad y el cariño que se profesan. Si estos dos juntos ya son oro, ha sido un total acierto añadir al bueno de Ouroboros interpretado por el premiadísimo Ke Huy Quan. El personaje completa a los otros dos de forma perfecta y con su negativa al creer en el time-slipping en la AVT pese a estar viéndolo; sus recuerdos del pasado con Loki sobrevenido; su resolución con la cinta americana o la introducción a la spaghettification como forma de muerte.

El nombre del personaje hace referencia a un símbolo que representa a una serpiente o dragón que se come su propia cola, formando un círculo representando la idea de que todo está interconectado y que cada cosa tiene un principio y un final dentro de un sistema más grande. Espero que OB nos acompañe durante el máximo de episodios posible, tiene carisma y aporta un sentido práctico de las cosas que contrasta con la paz que irradia Mobius y con el exceso de carácter y arrogancia de Loki.

En general, el episodio me ha divertido bastante, puede que haya sido diferente a lo que yo esperaba, pero me lo he pasado bien y tras una espera tan larga ha sido genial volver a pasarlo bien con la mejor serie Marvel en Disney+.