Review The Walking Dead: Outpost 22

Review The Walking Dead: Outpost 22

Terminamos el episodio pasado con el descubrimiento de un tren funcional, un misterioso tren que formaba parte de los planes expansionistas de la Commonwealth. El tren necesita mantenimiento y una buena adecuación de las vías. Y esos trabajos son para los esclavos, para pobres hombres y mujeres que han molestado a la dictadura Milton y han sido condenado a trabajar de sol a sol para construir el mundo que Milton quiere.

Nuestros personajes empezaron a relacionarse con la Commonwealth en los vagones de un tren, uno que no estaba en funcionamiento. Me parece aceptablemente poético como ahora es precisamente a causa de un tren que nuestros personajes van a acabar con el sistema de Pamela. Porque van a acabar con Pamela y toda su gente, de eso estamos seguros.

Al terminar el episodio de la semana pasada, Lance nos habló de ese tren, así que me ha sorprendido bastante ver a nuestros personajes en una caravana compuesta por distintos coches todoterreno, supongo que me esperaba que en episodio comenzara ya en las vias. Uno de esos coches transporta en su interior a Gabriel, Rosita y Maggie con un guardia dormido. Los soldados de la Commonwealth no están lo suficientemente bien entrenados si se quedan dormidos con prisioneros de esta envergadura, es bastante penoso recurrir al típico vigilante dormido para que los nuestros puedan escapar… pero vale, aceptaremos que Mercer no ha entrenado bien a su gente. Asumamos también que aunque Mercer podría haberlos avisado de lo peligroso que son estos prisioneros, por alguna razón ha mantenido silencio.

Obviamente, el primer grupo de personajes escapa… lo cual les resultan sencillo si, repito, los vigila un soldado dormido. Mientras que Carol y Daryl siguen las vías en un coche, Maggie lo hace a pie después de estrellar el coche que los transportaba; Gabriel y Rosita también van a pie, pero algo más retrasados que Maggie. Afortunadamente todos se reúnen enseguida. Hubiera sido muy cutre mantener a los grupos separados, cuando sabemos que todos usan las vias como referencia y que no pueden estar muy lejos unos de otros. Una vez se reúnen atan cabos al respecto de la situación en la que se encuentran, sonsacan a un pobre soldado moribundo de la Commonwealth y deciden que pueden salvar a los niños y salvar a Connie, sin que ninguno de los planes ponga el otro en peligro. Todo se siente apresurado y un poco falto de acción, como si estuviéramos ante los primeros pasos de un plan pero aún no nos hubiéramos enfrascado en el meollo del mismo.

Los demás personajes siguen dándose cuenta de que han sido condenados a trabajos forzados. Y no pasa mucho en esa trama, no conocemos a ningún personaje nuevo importante y vemos que los guardias matan a cualquiera que intente escapar, algo bastante fácil de suponer.  Ezekiel y Negan mantienen una conversación. Me gusta que Ezekiel no haya olvidado la clase de villano que fue el líder de Los salvadores, a veces siento como que los guionistas quieren vendernos a Negan como un héroe, cuando en nuestras cabezas siempre será el tío que mató a Glenn. 

Los dos hombres conversan sobre lo importante que es mantener la esperanza en la gente,  especialmente en la gente que no tiene motivos para tenerla. Negan quiere sembrar las semillas de la sublevación y es conocedor de que no puede hacerlo en un montón de personas derrotadas y resignadas a esas derrota. Puesto que él no sabe inspirar nada positivo en los demás, le encarga esa misión al bueno de Ezekiel. No sé a dónde nos conducirá este plan, pero sé que no quiero asistir al enésimo momento de redención de Negan, creo que todos estamos preparados para pasar página y a estas alturas de la serie o lo matan de una dichosa vez o lo convierten en un miembro más del equipo en igualdad con los demás. Sí que estaría bien que su redención fuera sacrificarse para salvar a los demás, pero dudo que se atrevan con algo así.

Estamos ante el final de la Commonwealth y nos dirigimos precisamente a Alexandria. Me gusta que cerremos el círculo volviendo a casa. No es la mejor idea del mundo que los villanos se dirijan al terreno de los héroes para protagonizar la batalla final, pero aún así, me parece bastante bonito que los guionistas hayan decidido regresar a un escenario conocido para representar el acto final de la serie.

Mientras, Eugene, sigue posiblemente preso en los calabozos de la Commonwealth; Yumiko estará trabajando en el caso; Max y su hermano habrán discutido unas pocas veces, pero es posible que al final reine el sentido común y Mercer acepte que su hermana tiene razón y se rebele contra Pamela. Los niños no sabemos muy bien lo que están haciendo, pero tienen a Judith, que por fuera es una niña pero por dentro una guerrera capaz de poner en jaque a cualquiera que los tenga prisioneros.

Esperemos que la semana próxima tengamos un poco más de acción y muchos más zombies.