Review The Last of Us: When We Are in Need

Review The Last of Us: When We Are in Need

iiHemos tenido acción a raudales, pues tanto de manos de Ellie como de Joel asistimos a grandes momentos de acción; hemos mirado a Ellie crecer, huir, luchar y ganar; hemos visto la crueldad latente bajo la piel de Joel y hemos sido testigos de la decadencia de la humanidad en situaciones limite.

Me parece interesante que algunas personas, huyendo de la dictadura militar de FEDRA, terminen asociadas en pequeñas comunidades. Me gusta que algunos grupos huyendo del temor a la anarquía de los saqueadores se asocien y creen grupos con sus normas y sus líderes. Me convence que del miedo a cordyceps nazcan ciertas sectas religiosas. Me parece genial como nos presentan a esta comunidad que antaño era aceptablemente amigable y que termina convirtiéndose en un grupo de personas grises con rostros contrariados que cierran los ojos ante la realidad de haberse convertido en caníbales.

Un episodio muy bueno que ha contado muchas cosas y que creo que se hubieran contado mejor en un par de episodios.

Una de las cosas que menos me está gustando de esta temporada es que se atañen a una historia por episodio de forma muy radical. Creo que es evidente que el Flashback de la semana pasada o los relatos independientes a la trama principal, como puede ser el caso de Bill y Frank funcionan a la perfección en un episodio que sea algo así como un cortometraje con su presentación, nudo y desenlace. Pero esa formula no tiene porque ser la regla obligatoria en todos los episodios de la serie. Si hacen un episodio con una idea aislada o basado en recuerdos y algo de esa historia sirve para enriquecer la trama principal o para conocer mejor a sus personajes, el resultado puede sobresaliente. Pero repito que no hay que hacerlo siempre así.

El problema viene cuando historias tan interesantes y con tanta profundidad como la que hemos visto en este episodio se despachan en un abrir y cerrar de ojos.

Me parece interesante que se explore que los villanos son los héroes de sus propias historias, aunque es una idea que ya acariciamos en Texas con los rebeldes, es positivo afrontarlo desde distintas perspectivas. Joel mató a un hombre en la universidad, un hombre que tenía amigos, que vivía en una comunidad, un hombre que era padre de una muchacha de una edad similar a la de Ellie. Es comprensible que esa gente defienda a los suyos y es comprensible que quieran venganza por la muerte del tipo llamado Alec, por supuesto, es comprensible que Joel y Ellie se defiendan. Puesto que puedo comprenderlos a todos me hubiera gustado entretenernos más con toda esta idea.

La comunidad religiosa devenida en caníbal presentaba muchos puntos interesantes, desde el primer momento era patente la sobriedad en el ambiente y la desconfianza entre los miembros de las altas esferas, veíamos como la manera en la que James y David se miraban tenía de todo menos confianza. Se respiraba un ambiente enrarecido y esa forma en la que se hace el silencio cuando una niña pide enterrar el cuerpo de su padre es perturbadora, aunque es peor escuchar a una cocinera que pregunta -¿esto que es?- cuando le dan un plato de carne para asar.

Se intuía que estaba pasando algo raro ahí. El líder parecía afable y terrible al mismo tiempo, consuela a una huérfana con la misma parsimonía con la que le pega un bofetón, pero sus hombres no sólo desconfiaban de él sino que estaban incómodos en general. Todo eso me ha parecido interesante, sobre todo en contraposición a la aldea comunista que conocimos hace un par de semanas en las que todos vivían felices cantando el Kumbaya.

El líder intentó fichar a Ellie como concubina o algo similar cinco minutos antes de intentar matarla. Me ha parecido un villano de muchísimo nivel y creo que aunque el personaje de Melanie Lynskey como líder rebelde fue interesante, David  aka from teacher to preacher because it fucking rhymes la ha superado con creces y se ha convertido en el mejor villano de la temporada… y se lo ha cargado Ellie.

Desgraciadamente hemos despachado en un momento a esta comunidad y a su jefe, que con todos sus matices y con todas esas escalas de grises parecía muy interesante. Creo que hubiera sido mucho más interesante desarrollar esta trama en un arco de al menos dos episodios.

Bella Ramsay lleva dos episodios cargando con la totalidad de la serie y la verdad es que lo hace bastante bien la muchacha, creo que todos sabíamos que Pascal cumpliría con crecer y sospechábamos que la muchacha lo haría bien, pero nuestras sospechas parecen confirmadas y superadas.

En esta ocasión la hemos visto tanto pasar miedo como salir victoriosa. La hemos visto actuar con la astucia que ya le conocemos y salvar su pellejo usando sus marcas en el brazo como elemento de distracción, y sobre todo, la hemos visto vencida por la rabia y la desesperación, enseñándose a cuchilladas con el cuerpo del mejor villano de la temporada.