Review Legacies: I Can't Be the One to Stop You

Review Legacies: I Can’t Be the One to Stop You

¡Feliz Navidad! Me fastidia un poco no haber tenido esta review antes, pero, como viene siendo habitual, HBO Max tiene que hacer de las suyas, y esta vez se superó: en lugar de poner el episodio que tocaba, puso el 4×05 como si fuera ese noveno capítulo; todo un hito en una plataforma que sigue dejando indicios de que no hay nadie al volante aún. Pero centrémonos en lo positivo: Legacies sigue en un estado de forma excelente, y se va de parón cerrando, posiblemente, su mejor tramo consecutivo de emisión.

Tras la aparición en el anterior de una vieja conocida de The Originals, nos quedábamos con que Hope ahora estaba en el cuerpo de Aurora, y la vampiresa en el de la hija de Klaus. Lejos de que nos hiciéramos ideas acerca de lo que iba a hacer este personaje en Legacies, se la han quitado de un plumazo, encerrándola en un sarcófago, y creo que guardándola por si les interesa recuperarla en un futuro cercano, para enfocar su atención en algo más importante: los personajes de esta serie.

Las hermanas Saltzman han tenido revelaciones diferentes tras sus visitas a la caja terapéutica: Lizzie optó por el camino de la venganza, mientas que Josie ha elegido el suyo propio, alejándose de su familia y amigos para encontrar la mejor versión de sí misma, sin estar supeditada al drama sobrenatural de la semana, o a alguno de los protagonistas teniendo un problema que solo ella puede arreglar. Cada una ha tenido un cierre de mid season distinto, y se abren nuevos caminos para ambas… y encima creo que han solventado una cuestión que pendía sobre sus cabezas desde el arranque de la serie con los acontecimientos de este 4×09: la fusión de su aquelarre.

Ya desde The Vampire Diaries, y durante la emisión de la franquicia en televisión, se nos ha contado que el aquelarre del que descienden tiene un momento culminante si hablamos de la vida de dos hermanos: la fusión que deben llevar a cabo a los veintidós años de edad, para que el dominante obtenga la totalidad de los poderes que comparte con su familiar. Es algo que ha sido recurrente en esta serie, y la excusa que usaron para explicar por qué Caroline no está en Mystic Falls, por aquello de que está buscando una manera de que sus hijas no pasen por ese trago. Claro, también dije yo durante estos años de reviews que sí, volvían a ello de tanto en tanto, pero a menos que hubiera un salto temporal, o que la ficción durara muchos más años, no veía cómo podíamos llegar a ese punto. Creo que desde la sala de guionistas han visto que las opciones eran complicadas, y han hecho lo que muchas veces las personas hacemos en diferentes momentos de nuestras vidas: con los recursos que tenemos, tomar las decisiones oportunas para sacar el máximo rendimiento posible de la coyuntura.

Kaylee Bryant, actriz que ha dado vida a Josie Saltzman, se va de la serie. ¿Significa eso que ya no veremos más a su personaje en Legacies? No lo creo. Aquí, salvo que mueras (y ni aún así), es raro que no vuelvas en algún momento. La hija de Alaric se marcha de Mystic Falls para encontrar su camino, y cuando está en la parada del autobús nota que hay algo que no cuadra, cosas de gemelas supongo. Me ha gustado mucho la conversación que tienen las dos dentro del bus, porque creo que era necesario que se despidieran de alguna forma. Si no me equivoco, es la primera marcha importante de un miembro del cast original; son cosas que pasan, y a medida que avance la serie, puede que siga pasando. Lo raro es irte de una serie así sana y salva, cuando lo normal es que tu personaje salga con los dos pies por delante.

Como casi le pasa a Lizzie… o le pasa, en cierta manera. Antes hablaba que se han cargado de un plumazo la relevancia de Aurora, porque ahora, más rival para Hope que la vampiresa de otra serie es su amiga Lizzie, que había pensado en todo, por si las moscas. La fusión parece que no va a llegar a producirse porque la hija de Alaric tenía en la recámara el recurso de la sangre de vampiro por si Hope estaba en un punto de no retorno casi total, y casi diría que así es. Lo más fácil habría sido que la hija de Klaus recuperara la humanidad en esa escena que engaña a Lizzie, y tampoco me hubiera parecido descabellado llegados a este punto. No obstante, los responsables de la serie han decidido seguir por el camino valiente y continuar con la vía de Hope sin humanidad, y me parece un acierto tremendo. Algo que caracterizaba a las mejores etapas de la serie madre era cuando se atrevían a arriesgar y apostar por giros y tramas ambiciosas, y tras deshacernos de Malivore, le está quedando genial a Legacies este tono. Tengo muchas ganas de ver cómo sigue todo esto.

Mientras, en la Escuela Salvatore, parece que tenemos un nuevo frente abierto, con la llegada de un nuevo… ¿alumno? Kaleb y Ethan se ven afectados por su presencia, al tener parte monstruo otorgada por Malivore, y el chico advierte a Jed de que sus problemas parece que van a seguir aumentando. Además, el que era humano hasta hace bien poco resulta que se la había jugado a MG, y le había estado mintiendo en su cara todo este tiempo acerca de su conversación con Lizzie sobre la estaca de roble. A ver en qué queda la cosa, y qué es exactamente ese recién llegado a la escuela.

Y bueno, no me olvido del trío del limbo, que siguen con su particular recolección de monedas para encontrar la forma de salir de allí. Algo que resulta ser infructuoso, porque necesitan más de una para granjearse el favor del barquero y que les lleve a otros planos de existencia, hasta que Alaric se cansa y recurre a una vieja conocida: la esfinge, que la hemos tenido en otras ocasiones, profetizando futuros eventos que han ido sucediéndose en temporadas anteriores. A ver qué nos cuenta esta vez.

Legacies se marcha hasta el 27 de enero, y lo hace, como decía arriba, casi con total seguridad, en el mejor momento de su trayectoria. Tras una tercera que decepcionó, se han puesto las pilas, y han jugado muy bien sus cartas, y nos están ofreciendo un entretenimiento a la altura de los grandes arcos de sus series predecesoras. Lo único que me queda por decir es, feliz Navidad, felices fiestas, feliz año, y nos vemos en un mes. ¡Gracias por seguirnos!