Sense8 fue uno de los bombazos de 2015, con la original mezcla e interacción entre unos personajes tan diversos, el uso de localizaciones exóticas y tocando temas que potenciaban ciertas partes de nuestra, cada vez más moderna, sociedad. Las, actualmente, hermanas Wachowski nos sorprendían con un producto fresco y entretenido pero con un gran problema, la serie era hueca en cuanto contenido, a los personajes les pasaban cosas pero no se veía trasfondo ni vía por donde avanzar. Eso lo arreglaron parcialmente en el final de esa temporada, lo que consiguió que dejara un buen sabor de boca.

La segunda temporada ha dejado claro que tienen algo que contar; pero eso sí, a su ritmo. Tras la larga presentación de los personajes, conocida como Season 1, nos metemos de lleno en el universo de los Homo Sensorium. Durante el inicio se centran en explicar lo que faltó en la anterior temporada, pero como si fuera una Mayra Gomez Kemp de la vida, llega un momento en que dicen: “Hasta aquí puedo leer”. Lo malo es que eso pasa a la mitad de la temporada, y a partir de ahí todo eso se va a un segundo plano, centrándose ahora en cerrar las tramas que habían abierto con algunos personajes. Sólo al final vemos que han repetido la fórmula; se han guardado lo que quedaba para el acto final.

En lo que no falla esta serie es en los personajes. Ya fue lo más que me gustó de la temporada pasada, y en esta lo siguen tratando de igual manera. Aunque siguen teniendo un peso desigual, donde hay personajes que me importan poco (y por suerte los Wachowski parecen coincidir conmigo dándoles un mínimo protagonismo), mientras que otros mantienen, o varían mínimamente, su relevancia respecto a la pasada temporada.

Personalmente, las historias con las que más he disfrutado han sido las de Sun y Lito, seguidas de la de Gorski con Riley, Nomi y el «nuevo» Capheus. Mientras que Wolfgang me ha parecido el que más ha salido perdiendo esta temporada, y aunque su trama con uno de los nuevos personajes me ha parecido interesante (tomando inesperada importancia al final) y ha tenido momentazos Made in Germany (como la escena del restaurante), toda la temporada me ha parecido que han contado su historia con el freno de mano echado. Para terminar hablaré de Kala; si ya antes me parecía que sobraba, en esta no ha hecho más que confirmar mi sentimiento. Ya sin centrarnos en la octupla protagonista, tengo menciones especiales tanto para las nuevas incorporaciones como para antiguos conocidos: Amanita (Pareja de Nomi), Daniela (la amiga de Lito y Hernando), la mayor relevancia Bug (el hacker amigo de Nomi), Min-Jung (Que ayuda a Sun), la incorporación del químico que conoce Riley, y la que mencione antes con su trama con Wolfgang. Todos ellos han enriquecido mucho las historias de los propios protagonistas, teniendo ellos mismos algunos momentos memorables durante la temporada.

Para acabar. La serie ha cumplido con lo esperado, además de habernos dado algo más de trasfondo en este universo creado por las Wachowski. Es una serie que, si te ha gustado la primera, al ser más de lo mismo (incluso algo mejor para mi gusto) no debería defraudar a sus seguidores. Además que debido a la trascendencia que tiene la serie no veo que tenga problemas para que dure lo que tenga que durar, y así poder contar toda su historia. Me sorprendería mucho que se llegara a cancelar antes de eso. Solo les pido que se den un poco de prisa, que a este ritmo parece que van a necesitar 10 temporadas para todo lo que quieren contar.