Pilotos: Y The Last Man

Pilotos: Y The Last Man

Hoy llega Disney+ la adaptación televisiva del cómic Y: The Last Man, escrito por Brian K. Vaughan (autor de otras obras como Saga o series como Under the dome, la ficción que adaptó la novela de Stephen King para la CBS). La serie llegó a las pantallas de Estados Unidos la semana pasada, así que nosotros os traemos sin spoilers nuestra opinión sobre los 3 primeros episodios.

Desde que se lee la primera sinopsis, resulta evidente que el planteamiento va ser más que sencillo: un apocalipsis, un caos generalizado y un protagonista con la vitola de “el elegido” que ya hemos visto en muchas otras obras. El mundo de Y:The Last Man es uno en el que de un día para otro mueren todos los hombres del planeta, salvo uno, nuestro protagonista que junto a su mono deberá sobrevivir en este nuevo mundo siendo la única persona de género masculino que sigue viva siendo y a lo mejor la clave para entender todo lo que ha pasado.

Visto por encima puede parecer una premisa interesante dentro de lo que son las historias post-apocalípticas y a mí desde luego me llamó la atención, pues a priori su enfoque se centra más en el buscar respuestas y en cómo se reorganiza el mundo que en la mera supervivencia, de hecho su presentación de personajes es más que notable utilizando como fondo la previa el evento apocalíptico y el momento en el que mundo se va a pique, pero su problema radica en que partir de ahí se acaba todo lo positivo y que sobre esos buenos cimientos la serie no sabe construir nada.

Una vez ocurre todo, nos encontramos ante una ficción llena de clichés y deus ex-machina constantes a los cuales no la ayudan un ritmo que cae en picado, que aunque se entienda que es porque quieren explicar la situación actual, se termina haciendo bastante tedioso pues a parte del misterio de supervivencia del protagonista, el resto de subtramas que presentan están tan manidas que dan poco lugar para sorpresas.

Sin embargo no todo es malo, pues si bien la serie en lo que llevamos visto va cayendo el picado, su primer episodio da esperanzas de que en algún momento la serie puede volver a alzarse; no para llegar un nivel sobresaliente, pero sí para que por lo menos nos encontremos ante una ficción cuanto menos entretenida de ver.