Review Legends of Tomorrow: Wet Hot American Bummer

Review Legends of Tomorrow: Wet Hot American Bummer

La dinámica de la temporada se repite en este episodio: atmósfera fresca y divertida salpicada con algunas gotas de reflexiones profundas. Esta vez situamos a los personajes en el típico entorno infantil de película de miedo, un campamento de verano con bestia del lago, un escenario que se aprovecha para que algunos de los personajes se recreen en su propia infancia (o ausencia de la misma) y otros piensen en los niños de una forma novedosa.

El episodio se divide en dos tramas y tres grupos de personajes, por un lado tenemos a quienes quedan dentro de la Waverider, donde forman una fantástica pareja Mick y Charlie; mientras en el campamento ejercen de orientadores por un lado Joh y Ray y por otro Sara y Ava. Es ésta última quien nos brinda los mejores momentos de corte serio,  Recordemos que Ava no tuvo infancia, en sentido estricto y literal: no tuvo infancia porque fue creada como clon de un adulto. El personaje no sabe como enfrentarse a la situación  porque no sabe lo que es ser una niña y termina tratando a las muchachas como soldados en un campo de entrenamiento. Obviamente sus técnicas no funcionan y las niñas termina gastándole una broma y burlándose de ella.

Sara no tiene en cuenta las necesidades de su pareja, posiblemente ni siquiera caiga en la cuenta de que no tuvo infancia. Sara está demasiado ensimismada en la suya propia y habla de sus campamentos infantiles con emoción, recordando una etapa vital anterior a Black Canary, una época en la que Laurel estaba viva y Sara aún no había matado a nadie ni sentía la aguja de la culpabilidad clavada en su corazón. Ver a los personajes interpretados por versiones más jóvenes ha tenido su encanto, sobre todo al ver la dificultad de Ava al desenvolverse en un contexto que le es ajeno y al ver a las dos mujeres amagar el primer beso cuando aún eran niñas.

Por su parte, Constantine ha incumplido su propia norma de no cambiarse ropa y ha terminado disfrazándose aunque le costó renunciar a la corbata y escondió un paquete de tabaco en la manga de la camiseta.  Constantine prefiere la soledad por distintas razones, pero una de ellas es que teme por sus compañeros, posiblemente ya ha sentido el dolor de la muerte de demasiada gente querida. En este episodio lo hemos visto sentirse responsable de Ray, de alguna manera descubrimos que lo trata mal porque teme por él.

Es interesante que John nos abra a los ojos respecto al exceso de ingenuidad de Ray, un tipo que sabe desenvolver en el mundo, un hombre inteligentísimo, pero que tiene una visión demasiado hermosa del mundo y tiende a ver lo mejor en cualquiera al que mire. Algo que según la nueva incorporación al equipo puede terminar costándole la vida. Las personas como Nora o como John son una fuente de desgracias y dolor para la gente como Ray, pero de algún modo, las personas que han visto de cerca a los demonios necesitan del buen corazón de gente como Ray, gente que confíe en ellos y los haga ser mejores.

John le otorga a uno de los niños parte de su propia energía vital y queda muy dañado a causa de ello, parece que la única posibilidad de salvación es recurrir a Nora, esto puede ser interesante, pero no creo que encaje como nueva incorporación al equipo… quizás son demasiadas las nuevas incorporaciones que nos han llegado este año.  En todo caso, pinta interesante que no nos olvidemos de Nora y que el personaje se mantenga como recurrente en la serie.

Mientras tanto Zari es engañada por la cambiaformas presa, una mujer que pese a tener idéntico aspecto físico que Amaya no se parece en nada a ella. Es todo un acierto seguir usando a la actriz después de deshacernos de Amaya. Además, creo que Charlie mejora al personaje anterior de Maisey. Y lo más interesante es que Mick y Charlie establecen una alianza basada en el tiempo que ambos pasaron entre rejas. Un poco de alcohol y alguna conversación basta para que Charlie acepte ser parte del equipo y aparezca con su outfit medio punky lista para entrar en acción.

Por cierto, ha sido un episodio de lo más divertido y creo que nadie ha echado en falta a Nate en el equipo… espero que los guionistas solventen la situación con éxito y nos dejen descansar de Nate o lo conviertan en alguien un poco más interesante. Poco a poco el personaje ha perdido fuelle y ahora mismo tiene un difícil encaje en el equipo. Por ahora, lo cierto es que tengo cierta curiosidad por ver qué tal reacciona con Charlie, pero es más cierto aún que en todo el episodio no ha salido ni una vez y no lo he echado en falta. Ni a él, ni a Gary, dicho sea de paso.