Review Ted Lasso: Lavender

Review Ted Lasso: Lavender

Tras una magnífica premiere, es el turno de hablar de un episodio que puede que no haya sido tan potente pero que sí que aparenta ser más relevante de cara al futuro de la ficción que el de la semana pasada, centrado sobre todo en las figuras de dos ex-jugadores del Ritchmond: Roy Kent y Jamie Tartt y lo que les ha deparado la vida tras el final de la primera temporada.

De Roy Kent ya sabíamos que seguía con Keeley y que ahora se dedicaba a entrenar al equipo de fútbol infantil en el que juega su sobrina, pero aún con todo eso es algo que no le termina de llenar como lo hacía cuando estaba en el terreno de juego. Esta situación también afecta a Keeley, quien se ve frustrada por la falta de rumbo de Roy y por el hecho de que el mismo no decida actuar ante ello. Es aquí donde entran los contactos de ella para ponerle dentro de lo que es el mundo televisivo dándole una prueba en una tertulia post-partido en la cual su actitud hace que lo borde, dándole la televisión un nuevo lugar en el mundo y el próximo desafío de su carrera.

Pasamos de uno que entra en la televisión a uno que sale de ella. Bien, la semana pasada se nos mostró como Jamie estaba participando en un reality y es que resulta, que el jugador dejó abandonado al Manchester City y se fue al programa básicamente para escapar de las garras de su padre, el problema está que al salir de este se encuentra sin posibilidad de volver al Manchester City y con cualquier probabilidad de fichar por un equipo dinamitada por su carácter y por la forma que tuvo de irse de su anterior club.

¿Cual es la única opción que le queda a Jamie? Suplicarle a Ted (previo paso por Keeley) la oportunidad de volver a Ritchmond, idea con la que tanto Ted como el resto de su equipo no están de acuerdo en un principio por lo que supondría de cara al vestuario traerle de vuelta. Ya de por sí el propio rumor desemboca en que Ted tenga un altercado con Sam, que fue uno de los jugadores que más lo sufrió durante su anterior estancia en la entidad. Sin embargo, al final Ted opta por concederle la segunda oportunidad a Jaimie y dejarle volver al Ritchmond.

Me parece muy importante todo lo de vuelta de Jamie, porque juntado con la aparición de la psicóloga puede suponer un punto de inflexión en lo que es la relación de Ted con el vestuario, pues aunque creo tras el doble varapalo que se ha llevado Jamie hará que tenga una actitud distinta, no hay que olvidar su presencia de nuevo en el vestuario choca mucho con algunos de los pesos pesados que más apoyaban a Ted.

Aprovechando que he mencionado a la psicóloga, en el episodio hemos visto cómo poco a poco Ted va acercándose a ella, dándome a entender que mi miedo por ver una guerra de poder entre ella y Ted no tenía mucho recorrido, aunque me imagino que su figura va a ser importante a la hora de gestionar la vuelta de Jamie.

Episodio no tan divertido como el anterior, pero con muchos elementos que van a dar juego a medida que avance la temporada.