Regresamos con el repaso a lo más destacado de cada mes, y contamos con una doble representación en comedia entre las elecciones de nuestros colaboradores. María se ha quedado con la tercera entrega de Only Murders in the Building, que regresó en agosto; e Iván nos hablará de la quinta temporada de What We Do in the Shadows, que concluyó hace unas semanas. Por su parte, Víctor ha escogido uno de los estrenos más destacados del verano, One Piece; y Daniel ha optado por otra que volvía a televisión el pasado mes, Winning Time, de HBO. Sus opiniones, a continuación.

Lo Mejor del Mes para María

Only Murders in the Building

Cualquier serie que llega hasta una tercera temporada muestra ciertos signos de agotamiento, es inevitable sufrir el desgaste del tiempo y la desgana de unos espectadores que ya no se sorprenden del producto y se dejan seducir por otros nuevos.

Only Murders in the Building no es la excepción. Es evidente que ya no se trata del producto fresco y novedoso que vimos en la primera temporada, muchas cosas no han salido bien ni han evolucionado correctamente y aunque la primera temporada fue brillante, creo que todos coincidimos en que la segunda no lo fue tanto. Además suma puntos en negativo el formato de comedia (los gagas se agotan), los personajes que ya conocemos y para colmo resta que el argumento principal sea policial, ya que es complicado construir crímenes con resoluciones verosímiles año tras año. Pero pese a todo eso y teniendo en cuenta que es dificil mantenerse en lo más alto, la verdad es que esta comedia, que podemos ver en Disney plus, no se ha desgastado hasta el punto de ser aburrida. Es cierto que los productores han apostado fuerte por las nuevas incorporaciones al reparto, que soportan gran parte del peso en esta tercera temporada y que son intérpretes de muy alto nivel. Esta temporada adolece de cierta dependencia hacia Meryl Streep, creo que ese es el mayor problema de la temporada e incluso puede que sea el único verdadero problema. Pero, creo que no es una mala noticia que alguien como Meryl Streep sea «lo peor» de tu serie. Me da algo de lástima el exceso de foco en la actriz invitada en la medida en la que desluce a los tres protagonistas que nos han enamorado a lo largo de las dos temporadas anteriores.

Sea como sea, durante esta tercera temporada la trama me ha parecido repleta de chispa, quizás un poco menos interesante que la de la primera temporada, pero bastante más frenética que la trama de la segunda, a la que terminé viéndole algunas lagunas. El ambiente del teatro, una notable evolución en los personajes principales y la propuesta de contar la historia con cierto toque diferente me ha encandilado completamente. Creo que los episodios que hemos visto este agosto superan con nota el reto de engancharnos a una tercera temporada y mantiene un altísimo nivel. 

Lo Mejor del Mes para Iván

What We Do in the Shadows

Muchos sabéis qué What We Do In The Shadows es una comedia que personalmente me gusta bastante, prácticamente desde su primera temporada su tono de humor ha pegado siempre conmigo y no extraño que cuando está en emisión la deje caer por esta sección. No lo hago porque sea un fanboy incapaz de reconocer incluso los momentos malos, lo hago porque incluso en su peor temporada fue capaz de dejarnos grandes momentos que bajo mi punto de vista otras comedias son incapaces de conseguir.

Bien, entrando ahora en porque la traigo en esta ocasión, es porque simple y llanamente la serie no mostraba un nivel tan alto desde su segunda temporada. What we do in the Shadows se ha convertido en un elemento cada vez más extraño dentro de la ficción televisiva, una comedia que de verdad quiere ser una comedia en lugar de drama de media hora y poco a poco se ha ganado su lugar como una de las series más divertidas de la parrilla televisiva.

No me malinterpreten, series como Barry o The Bear me encantan, pero de vez en cuando agradezco que sigan quedando productos que lo apuesten absolutamente todo a la diversión.

Lo Mejor del Mes para Víctor

One Piece

Cuando hablamos de adaptaciones de un medio a otro, ya sea cine, libros o animación, nos entra una especie de sudor frío, ya que las estadísticas nos dicen que esa adaptación se la va a pegar y, además, manchará el producto fuente. Por suerte, las cabezas pensantes parecen haberse dado cuenta de que, si un producto ha triunfado, no hace falta reinventarlo por completo cuando se hace una adaptación. Seguramente todos estamos de acuerdo en que «The Last of Us» se puede considerar como un ejemplo acertado, y sin irnos muy lejos, optaré por «Cowboy Bebop» como ejemplo de lo contrario. Se podría hacer un debate bastante profundo en este sentido, pero solo quiero dejar en claro que el primer paso para ello es entender el material original. Tras esta reflexión, creo que está claro que «One Piece» entra, por suerte, en el primer grupo, ya que es la serie que he elegido como lo mejor de agosto.

Podría sorprender al ser un producto de Netflix, conocida por destrozar muchas grandes obras con sus vergonzosas adaptaciones, como la ya mencionada «Cowboy Bebop«, pero también otras como «Resident Evil», «Death Note», «The Witcher«, … Sin embargo, hay que aplaudirles por haber sacado un producto aparentemente tan difícil de adaptar, además de ser un manga y luego anime tan popular en muchos países. Sin ser conocedor del producto original, sí que he leído cosas positivas respecto a cómo lo han plasmado en pantalla, y como comenté antes, si un producto ya funciona, no se debe estar reinventando cosas ni bajarlas a niveles estúpidos para que el espectador no se pierda (Sí, esto va para cierta showrunner en particular).

La serie tiene un enorme potencial y han sabido aprovecharlo. No han caído en el clásico error de querer meter mucho en poco espacio, y se han centrado en contar la historia a un ritmo normal. Desarrollando el lore de ese mundo pirata con una historia que engancha desde el primer momento, y en los diversos arcos en los que se desarrolla la temporada, te termina atrapando. Mientras, nos van presentando poco a poco a los distintos personajes que rodean a Luffy, ya sea a los antagonistas como a los nuevos aliados y, sobre todo, a los miembros que irán conformando su nueva tripulación. Otro de los aciertos de la serie son sus personajes, todos bien desarrollados y con un trasfondo que no los encasilla como simples buenos o malos. Aunque hay villanos y héroes, como es lógico, también hay muchos personajes grises que encajan maravillosamente en la historia.

Tras esta genial primera temporada, que ha servido como presentación de personajes, introducción en el mundo pirata y la conformación del grupo de aventuras, solo nos queda esperar el regreso de Luffy y su tripulación para que continúe con su interminable búsqueda del One Piece.

Lo Mejor del Mes para Daniel

Winning Time

HBO es la mejor cadena productora de series de Estados Unidos. Esto no es una opinión, es un hecho. Para más pruebas, solo es necesario mirar en su hemeroteca, y encontraréis, tanto en dramas como en comedias, ficciones de las llamadas imprescindibles; más que en ninguna otra cadena o plataforma. Por lo tanto, cuando HBO estrena algo, hay que prestar atención. Luego hay descalabros como The Idol, pero son excepciones a la regla. Por desgracia, este verano se ha hablado más del fracaso de la de The Weeknd que de la que os voy a recomendar ahora, Winning Time.

Sin ser yo fan acérrimo del baloncesto, esta circunstancia no es óbice para que me lo pase pipa viendo la trama que nos acerca a la época dorada de los Lakers, en los años 80. Los conflictos internos, el manejo de egos en los vestuarios, entrenadores que tienen que gestionarlo todo, directivos que miran más por el beneficio económico propio que por el club en cuestión, rivalidades que traspasan la cancha… Todo esto y más lo tenemos, además de una algo muy importante: cuando te plantas delante de tu pantalla, y le das al botón de reproducción, tú puedes percibir que estás ante una producción de sello HBO, porque es palpable en la dirección, el buen elenco, el estilo, por todo; The Idol no era marca HBO, y esta sí.

Es un pecado que una producción así ya el año pasado llegara y se fuera de puntillas, y este año parece que ha hecho menos ruido todavía, teniendo más delito si cabe, viniendo de una lamentable The Idol. Si buscáis series de calidad, de las que definen a HBO como la más grande, poneos Winning Time y disfrutaréis de contenido de primer nivel, independientemente de que sepáis más de los hechos que cuenta, o que os guste o no el deporte en cuestión. Eso no es relevante porque las buenas historias están por encima de esas cuestiones, y Winning Time es una de esas series altamente recomendables de la cadena.

PD: incorporo este párrafo porque, a fecha de publicación de este artículo, HBO ha cancelado la serie tras dos entregas. Todo bastante lamentable, sinceramente. Es una pena que no haya tenido la repercusión merecida, como hacía hincapié antes.