Cuarta semana de reviews de Caballero Luna, y ya afrontamos la segunda mitad de serie a partir de ahora. La serie sigue un buen camino, y el episodio de hoy me ha gustado más que lo que vimos la semana anterior por diferentes razones, que toca analizar a continuación.

Hay dos partes muy diferenciadas en este cuarto capítulo, así que vamos a pararnos en cada una por separado también.

La de apertura me ha recordado mucho a películas de aventuras, como la saga de La Momia, o Indiana Jones mismamente, por lo que todo lo que se aproxime a referencias al género me gana de sobras. Nos adentramos con Steven/Marc y Layla en la tumba que alberga el artefacto que les acerque a Ammit, y así tomar ventaja con respecto a Harrow y sus secuaces. Ya vimos la semana anterior que nuestro protagonista había perdido la conexión con Khonshu, como consecuencia de que el dios les ayudara para encontrar la localización exacta, y quedara capturado en esa vasija que nos vuelven a mostrar al comienzo de este cuarto, donde aparece una galería con numerosas figuras, como si de Funkos se tratara. Este ha sido el primer episodio en el que no hemos visto a la deidad, aunque supongo que volverá a hacer acto de presencia nuevamente.

La búsqueda de la dupla protagonista les lleva hasta el corazón de la tumba, no sin antes tener que sortear obstáculos en forma de guardianes del lugar, que se dedican a guardar los diferentes órganos de aquellos humanos que osan perturbar esa localización. Me ha gustado la parte en la que Layla avanza sola y le acecha esa criatura. Era evidente que iba a salir airosa, pero la forma en la que han jugado con la tensión durante toda la escena me ha parecido un acierto. De paso, hemos conocido más sobre su pasado, y que su padre era un arqueólogo prestigioso, que se cruzó en el camino de Marc y acabó malparado, tal y como le deja caer Harrow. Luego descubriríamos que, cuando se nos contó que Khonshu salvó a Marc llegando al pacto que le otorgó los poderes, fue cuando murió el padre de Layla, asesinado por el compañero del mercenario, que se lo cargó también a él en el proceso.

Mientras, Steven llega nada más y nada menos que a la tumba de Alejandro el Magno, que oculta el objeto que andan buscando todos. Lo que podría haber sido una victoria de manual, termina empañada cuando Layla, lógicamente, carga contra Marc exigiendo explicaciones, y luego Harrow llega y dispara a Marc/Steven… ¿matándole?

Fuente: Disney Plus España.

Y aquí llegamos a la segunda parte, a la que podríamos denominar pseudo Legion. ¿No sabéis qué serie es Legion? Bueno, describirla o intentar explicar de lo que va es un ejercicio que no tengo ganas de llevar a cabo, pero diríamos que involucra psiquiátricos, gente con ropa blanca puesta, planos difusos y confusos, y gente con trastornos varios, por decir algo.

Vemos a Marc en un lugar completamente distinto, ingresado como paciente de ese sitio, y a personajes como Layla o Harrow en versiones diferentes. ¿Qué es real? ¿Lo que sucede en Egipto, o lo que transcurre en esta parte final de capítulo? Todo apunta a que será lo primero, y que todo esto sea parte de una ilusión o algo similar perpetrado por Harrow o como consecuencia de esa «muerte» de Marc/Steven. Sin ir más lejos, vemos como entes separados a ambos, al británico además encerrado en un sarcófago, algo curioso, porque, si no me equivoco, hay otro sarcófago que parece moverse cuando pasa Marc por delante de esa habitación antes de encontrar a Steven. ¿Puede ser esa tercera personalidad a la que se aludió en semanas anteriores?

Y, para cerrar, tenemos la nota de humor de Marvel Studios clásica; a mí el tono de humor habitual de la franquicia no me molesta en absoluto, y aquí queda, cuanto menos, curioso, porque venimos de todo un episodio bastante tenso, y en general lo visto hasta ahora no ha dejado demasiado espacio para la vis cómica de la saga, que tampoco he echado de menos, también os lo digo. Y claro, encontrarnos a la que se supone que es otra deidad egipcia, y que salude de forma simpática a nuestros protagonistas, pues choca un poco, porque quizá esperábamos cualquier reacción menos esa. Supongo que sabremos más la semana que viene, así que no voy a comentar nada al respecto de la identidad de esta diosa, pero con que busquéis un poco en Google, la podréis averiguar si tenéis curiosidad o sois unos ansias.

Este giro final de Caballero Luna abre un escenario bastante interesante, que tengo mucha curiosidad en ver hacia qué deriva. La serie necesitaba agitar algo la trama, ya que se estaba quedando un producto entretenido, sí, pero al que le fallaban algunas cosas. Veremos cómo sigue en el quinto, que analizaremos como siempre aquí, en Casa Spammer. Hasta la próxima.