Review Agents of SHIELD: Wake up

Review Agents of SHIELD: Wake up

La temporada sigue manteniendo un altísimo nivel, que nos sitúa a los personajes en situaciones de lo más complicadas y de las que no puedo afirmar que saldrá. Sabemos como se las gasta el amigo Whedon y que estemos humanizando a más personajes y abriendo el corazoncito de otros sólo me lleva a ponerme en lo peor… o dicho de otra forma, ¿a quién se cargaran este año?.

FakeMay es consciente de su naturaleza robótica y al más puro estilo WestWorld tiene una crisis de identidad que la lleva a enfrentarse a su creador, por un momento pensé que hoy veríamos el final de FakeMay cuya fidelidad a SHIELD  es tan grande que la llevaría a autodestruirse antes que a ser la marioneta de un enemigo, pero posiblemente este programada contra esto, igual que lo está para no dañar a Radcliffe o no desvelar su verdadera naturaleza a los demás miembros del equipo. También me extraña que deje pasar tan alegremente el detallito de que la verdadera May está secuestrada en alguna parte, pero lo hace, quizás debido a la programación o quizás porque Coulson y los demás intervinieron para detener a Radcliffe, a FakeRadcliffe. Así que la IA-May  finalmente se aferra a su parte más humana, representada en esta ocasión por el amor (o lo que sea) que le profesa a Coulson y esto nos deja a la verdadera May encerrada en un bucle de recuerdos y pelea… esta vez la dejamos en Bahrein, donde consigue salvar a aquella niñita a la que mató, acto que la convirtió en la mujer fría y despiadada que es hoy. Está bien que volvamos atrás en los recuerdos y experiencias de los personajes, pues recordar su bagaje emocional los hace mucho más humanos.  Hablando de humanidad, hemos descubierto que Mack es mucho más que un personaje secundario. En un primer momento era sólo atrezzo, el amigo de Fitz, o el amigo de la parejita atractiva (me pregunto qué ha sido de ellos), pero casi nunca tenía valor por si mismo como personaje. Apenas le conocíamos y tampoco nos daban material para encariñarnos con él. Pero, poco a poco, en esta cuarta temporada se le está dando algo de fondo y profundidad. Mack se ha convertido en un personaje mucho más rico e interesante. Ahora que conocemos que perdió a su hija recién nacida, quizás podamos ir entendiendo la razón por la cual el Ghost Rider lo eligió precisamente a él.

Por muy bien que conozcamos a los personajes parece que nos cuesta confiar en nuestro propio criterio cuando se trata de juzgarlos: yo sabía que no era propio de Fitz traicionar a la mujer a la que rescató de otro planeta, pero parecía que era eso lo que estaba haciendo y no lo cuestioné. Creo que todos creíamos que era la curiosidad científica lo que mantenía a Fitz obsesionado con Aida, pero realmente lo que estaba haciendo era investigar lo que hizo que Aida robara el Darkhold. Debido a su mala experiencia con los amigos en los que confía temía aceptar que Radcliffe también le hubiera estado engañando, pero aún así investigó cada detalle de la programación de Aida para dar con la verdad y descubrir que nunca fue idea de la androide robar el libro. Fue el doctor Radcliffe quien seducido por la imagen de poder infinito que le transmitió el libro, quien programó a Aida para hacerse con el Darkhold. Y Fitz lo ha descubierto, pero desgraciadamente para nuestros chicos, el doctor ególatra y egoísta se adelantó a las circunstancias y supo que Fitz descubriría la verdad en algún momento y colocó a otra IA en su lugar.

Los guionistas han pasado el episodio jugando con nosotros, que por un lado creíamos que uno de los miembros del equipo era una IA, pero hasta hoy no pensábamos que era el propio Radclifee quien se había replicado a si mismo para pedir la protección de la senadora Nadeer y huir de SHIELD. También creímos por un momento que May estaba de verdad luchando y que tenía alguna esperanza de escapar de su cautiverio, pero no no era así. Parece que hemos caído en la trampa, al igual que Coulson, Mace, Daisy y Yo-Yo, quienes han entregado SHIELD a la senadora Nadeer involuntariamente.  La senadora ha machacado con preguntas comprometidas a Daisy en su acto de firma del tratado de Sokovia. Preguntas que no sólo cuestionaban a la propia agente sino a la totalidad de SHIELD.

Y por cierto, aún no sabemos quién es el superior , parece que Radcliffe va a conocerlo pero nosotros aún no. Estoy desando saber quién es y qué quiere.