Review Arrow: Unmasked

Review Arrow: Unmasked

En circunstancias normales tendría que estar despidiendo la ficción por un tiempo, ya que nos encontramos con la mid Season Finale, y conllevaría que hasta enero, Arrow no volvería. No obstante, este año los responsables de The CW han decidido reestructurar la práctica habitual de realizar el crossover en los episodios x08 de las respectivas series del Arrowverse, y emitirlo en los x09, que tradicionalmente son los finales de mitad de temporada. Por lo tanto, las tramas particulares de cada serie ponen su punto y aparte esta semana, y la próxima tendremos Elseworlds, el crossover de este año (cuyas críticas podréis leer en esta web). Tras el fenomenal 7×07, nos han dejado con un 7×08 que ha estado a la altura de las circunstancias, abriendo nuevos frentes y conformando un episodio que deja un muy buen sabor de boca en los seguidores de la serie.

Y para empezar tenemos, nada más y nada menos, la revelación del rostro del nuevo Green Arrow… o debería decir nueva Green Arrow. Se trata de una mujer, de facciones asiáticas, y que simplemente la vemos entrenar y prepararse con el traje de justiciera, y que ya al final del capítulo se nos revela que estamos ante la hija de Robert Queen, y por ende, hermanastra de Oliver. No tenemos un nombre todavía (aunque si buscáis un poco por Internet encontraréis el personaje en el que está basado), pero parece decidida a continuar el legado de su padre y su hermano, tal y como habíamos visto en sus intervenciones a lo largo de esta entrega. No sabemos nada más acerca de ella, aunque supongo que nos ofrecerán en un futuro próximo un capítulo, o al menos parte de uno, en el que explicarán su historia y qué le ha llevado hasta Star City para continuar la misión de Oliver. No han querido mantener el misterio por más tiempo, y me alegro de que hayan tomado la decisión ahora, aprovechando el cliffhanger de la mid Season Finale.

Otra trama que se ha esclarecido un poco más es la del futuro. Para empezar, se nos ha dado una fecha concreta: veinte años más tarde que los acontecimientos presentes, es decir, 2038. La referencia a esa cifra también la hemos tenido con Oliver y Felicity, al mencionar que echan de menos a William y que parece que queden ese número de años hasta que lleguen las vacaciones de Navidad, fecha en la que entiendo que el chaval regresará a la ciudad, a pasar tiempo con su familia. ¿Mero guiño al tiempo entre periodos? ¿O es que realmente va a transcurrir ese tiempo sin que se vean? Yo creo que los segundo es más drástico, porque por contexto, entiendo que William lleva sin ver a Oliver y a Felicity un tiempo, pero no tanto. Además, una vez su padre fuera de prisión, ya dije la semana pasada que me parecía raro que el chico no volviera en el presente a Star City, o que apareciera de nuevo.

Dejando eso de lado, hemos conocido a Blackstar, la última persona que tuvo contacto con Felicity en el futuro antes de que la informática «muriera». Y lo entrecomillo porque hasta que no tenga pruebas fehacientes de que, efectivamente, murió de una forma u otra, no me creo que haya muerto. Es un truco demasiado viejo y, a riesgo de equivocarme, no me lo trago. Blackstar es una joven luchadora, que se gana la vida a base de chanchullos varios, o eso nos dice, y que colaboraba con Felicity en su proyecto para volar la ciudad. Esta chica también ha despertado mi interés, porque me ha dado por especular acerca de su identidad. ¿Podría ser la hija de Oliver y Felciity? Tendrá alrededor de veinte años, un estilo de lucha parecido al de su padre, rubia como ella… Son dos rasgos que realmente podría tener cualquier persona, pero puestos a especular, ¿por qué no?

Además, hemos conocido el significado de esa «Mark of Four» que se nos reveló en capítulos anteriores, y que René sigue vivo en el futuro, y está en los Glades, me atrevería a decir que liderándolos o siendo una figura prominente en la zona. Quizá tengamos una pista en el comentario que le hace Dinah en el presente, cuando le pregunta si alguna vez ha pensado en presentarse a la alcaldía. Una Dinah que, por cierto, tiene relación con el estado actual de la ciudad, o al menos eso nos deja entrever Blackstar cuando le suelta ese comentario. Sobre la «Mark of Four», pensaba que sería algo más serio, pero realmente no conocemos el contexto en el cual a Oliver se le ocurrió este término, o el momento de su concepción; quizá es un punto de la historia épico, y esa marca conlleva algo importante. Por ahora, me ha dejado algo frío esta revelación. Lo relevante veo que es cuándo se llevó a cabo: según Dinah, justo antes de que todo se fuera a pique. ¿Ocurrirá esta temporada?

Otra trama que acaba de cobrar mucho más interés tras este capítulo es la de Dig y Lyla, que en anteriores episodios había supuesto más relleno que otra cosa, y que ahora es un punto de interés mayor, ya que la investigación paralela de la directora de ARGUS le ha llevado a que todo lo que estaba tratando de destapar está conectado de alguna forma con los Longbow Hunters y Ricardo Díaz, hasta el punto que ella y John requieren de su ayuda. Por si no habíamos tenido suficiente, vamos a tener más de este villano durante más tiempo. Dependiendo de cómo vaya esta trama, me parecerá bien su extensión en la historia o me parecerá mal. Soy de la opinión de que deberían haber acabado con él hace bastante tiempo, o por lo menos en el anterior episodio, pero si han decidido mantenerle con vida, les voy a dar un voto de confianza y esperaré para valorar si realmente es de utilidad este enemigo o no. Por ahora, la sub trama de John acaba de ganar puntos para el futuro.

En cuanto al protagonista de esta historia, lo cierto es que se me hace raro verle desenmascarado. Estoy tan acostumbrado a verle trabajar en las sombras, con la capucha y el antifaz, que ahora a tumba abierta, sin nada que ocultar y, para colmo, colaborando activamente con la policía de Star City y como un recurso más de las fuerzas del orden de la ciudad, me choca un poco. No obstante, como él bien dice, las cosas han cambiado desde que empezamos la serie, y en eso consiste la evolución dentro de las ficciones, y encima tan largas y extensas como esta. Estamos ante la nueva realidad de Oliver Queen, y el ataque que ha sufrido en su casa lo veo lógico y normal, ahora que todos saben quién es, y la cantidad de enemigos que se ha labrado con los años, y se labrará. Eso precisamente ha llevado que las personas que le rodean hayan cambiado como consecuencia, como el caso de Felicity. Ya dije en anteriores reviews que me ha gustado el tono más oscuro que le han implementado al personaje de ella esta temporada, al verse alejada de Oliver y teniendo que valerse por sí misma, y que ha servido para recuperar el nivel perdido durante años, a consecuencia principalmente  de la sobreexplotación del Olicity. Si esto provoca que no todo sea amor y fantasía en casa de los Queen-Smoak, pues perfecto. Entiendo la sorpresa de Oliver al ver la reacción de su mujer, pero es lo que hay majo. No esperes que todo sea paz y amor cuando tu mundo es oscuro y no hay mucho margen para la bondad o el «buenismo». Esto no es The Flash, en la que Barry Allen puede permanecer puro y limpio durante todos estos años, con su esposa a la que le dan tramas absurdas y episodios más blancos que la camiseta del Real Madrid; Arrow tiene un tono mucho más oscuro, y sus personajes son consecuencia directa de esta historia, así que tener una protagonista como Felicity completamente blanca no era coherente con todo lo que ha pasado. Estoy completamente de acuerdo con esta decisión, y me alegro de que no vaya a variar en el futuro próximo.

Normalmente, me despediría de todos vosotros hasta dentro de un mes, pero no es el caso, ya que tendremos el crossover la semana que viene. Nos vemos entonces.