Gomorra, calidad napolitana

Gomorra, calidad napolitana

En mi habitual consumo de series, siempre acabo combinando ficciones que van emitiéndose semanalmente (rara es la vez que no tenga alguna en marcha), junto con aquellas que, por diferentes circunstancias, relego a otras épocas. Es el caso de Gomorra, producción de Sky Atlantic y con origen italiano, que he terminado por ver más tarde de lo que merecía, porque la falta de calidad no fue el motivo de que la dejara aparcada. Gracias a HBO España (que en junio lanzó las tres temporadas íntegras en nuestro país) me he puesto al día con la tercera entrega, y lo cierto es que es una pena que no la viera en su día, porque podría haber entrado en lo mejor de 2017 sin ningún problema.

Para los que no la conozcan, la sinopsis que nos deja HBO España en su menú cuando seleccionamos la ficción es un buen resumen, que es el siguiente:

Gomorra cuenta la historia de la Camorra, la violenta mafia napolitana, desde el punto de vista de Ciro. El joven es la mano derecha del líder del clan, Pietro Savastano y sabe mejor que nadie lo que significa la lealtad. Pietro decide sacrificar a muchos de los suyos solo para demostrar su poder al clan rival y entonces todo cambia. Una de las víctimas de la matanza era el padre de acogida de Ciro, un fiel miembro de la banda. Cuando Pietro va a la cárcel, el código de honor de Ciro le obliga a obedecer la voluntad de Pietro de ser el mentor de su hijo Gennaro y de su mujer Imma. Ninguno de los dos parece estar capacitado para tomar las riendas, pero aprenderán rápido…

Viéndolo desde la distancia de saber cómo ha evolucionado todo, realmente el camino recorrido por la serie es muy destacable. Siempre con un estilo barroco (por no decir rococó en la mayoría de ocasiones), Gomorra nos traslada a esos barrios de Nápoles donde las mafias campan a sus anchas, y sí, podríamos decir que el protagonista es Ciro, tal y como indica esa sinopsis que os he dejado. Pero poco a poco, van construyendo un universo a su alrededor que hace que todos los personajes que nos van presentando cobren fuerza e importancia a la par con el joven. Con un gran elenco, Gomorra logra que la crudeza italiana y las prácticas mafiosas nos enganchen con cada año que pasa, siempre mejorando lo visto con anterioridad.

Ya las dos entregas iniciales dejaron el listón muy alto, pero la tercera, emitida a finales del año pasado, creo que ya alcanzó ese punto en el que la serie pasa a ser (si no lo era ya) completamente imprescindible para todos los amantes del género, así como de las producciones europeas, que las hay muy buenas y muchos las desconocen (me aplico el cuento, ya que veo contadas, y debería ver alguna más).

Creo que uno de los elementos clave de este hecho es que la figura de Gennaro Savastano haya ganado tanta importancia, y retomo lo dicho en líneas anteriores. Ciro es el gran personaje (in my opinion) de Gomorra, pero todos aquellos que giran en torno a él no se quedan atrás, y «Genny» es uno de esos ejemplos, sobre todo de crecimiento, porque nada tiene que ver el joven heredero que conocemos en los inicios de la serie con el que vemos en esta tercera temporada. Otro soplo de aire fresco ha sido Enzo, cuya trama se integra con el conflicto que se arrastra de la entrega previa, y acaba siendo un personaje fundamental para el desenlace.

Tendremos una cuarta temporada, pero que no llegará hasta el año que viene (salvo sorpresa), por lo que es un buen momento, ahora además que el servicio streaming de HBO en nuestro país tiene todo lo emitido por la serie, para ver una de las mejores ficciones que el Viejo Continente ha lanzado en los últimos años. Gomorra es un gran producto mafioso que no te dejará indiferente.