Inauguramos una de nuestras secciones mensuales en este 2021. Es el turno de repasar lo que más ha gustado a nuestros colaboradores en televisión en este primer mes del año. Las ficciones elegidas han sido el anime Shingeki no Kyojin (Attack on Titan), que actualmente se encuentra emitiendo su temporada final; dos estrenos de enero como fueron The Serpent y Lupin; y la serie de ciencia ficción de Amazon, The Expanse, que repite tras colarse también en diciembre. Debajo tenéis las impresiones acerca de cada una de ellas.

Lo Mejor del Mes para Iván

Shingeki no Kyojin (Attack on Titan)

Hace tiempo hubo una guerra (bueno, tiempo lo que se dice tiempo, tampoco fue hace tanto), entre miembros del staff en la que se disputaron quién sería el encargado de escribir sobre Attack on Titan en la sección de enero. Al final, después de una ardua pelea, fui yo quien se alzó victorioso y el que os trae el que sin ninguna duda ha sido el mejor producto audiovisual emitido en este primer mes del año.

Sí, he sido tajante, pero cualquiera que siga la serie será consciente que semejante afirmación no es exagerada porque, en términos faltones, en todo el tramo que nos comprende el anime se ha ido “sacando la chorra” semana tras semana dejando un arco a la altura de la segunda mitad de la tercera temporada, el cual provocó que la serie se colara también en la sección mensual por parte de mi compañero Daniel.

Pero en fin, entrando sin spoilers en lo que han sido estos episodios, simplemente decir que ha sido la explosión de todo lo que se había sembrado durante los primeros compases de una temporada final en los cuales la serie pegaba un giro de 180º. Attack on Titan ha vuelto a demostrar que no solo es una serie que sabe generar expectación, sino que cuando toca echar la carne en el asador cumple y cuando ha llegado el momento que todos esperábamos desde el final de la tercera temporada, la ficción ha superado con creces cualquier expectativa.

Puede ser que mis palabras no sean suficientes, pero puedo irme a IMDB, coger las notas de los capítulos y contaros que en enero tenemos el tercer episodio de la historia con un 10 (junto con Ozymandias de Breaking Bad y Hero de la propia Attack on Titan), dos capítulos con un 9.9 y como «peor» uno con un nada desdeñable 9.5 … Puede que esta plataforma no sea la forma más idónea para juzgar productos, pero si que me parece representativa de porqué lo vivido este mes en la serie tiene una trascendencia más allá de los formatos, porque lo que está haciendo Attack on Titan es historia de la televisión.

Lo Mejor del Mes para Daniel

The Serpent

Vamos a dejarlo claro desde el principio: in my opinion, lo mejor de enero ha sido Shingeki no Kyojin, pero como en Casa Spammer compartimos como buenos hermanos, y dado que mi opción finalmente elegida ha sido un estreno digno de entrar en esta sección, por eso no estoy hablando del popular anime yo y lo ha hecho antes mi compañero Iván. Y es que la miniserie británica The Serpent llegó temprano, el primer día del año, y ha dejado muy buenas sensaciones y el nivel demostrado la sitúa como uno de los mejores estrenos de lo que llevamos de 2021.

La ficción de tan solo ocho episodios está basada en hechos reales, en las acciones de un asesino en serie apodado de la misma manera, que dejó un rastro considerable de víctimas durante los años setenta, repartidas entre países asiáticos como India, Irán, Tailandia o Nepal, todos ellos turistas occidentales que buscaban experiencias nuevas en el continente, y de los que él, Charles Sobhraj (interpretado por Tahar Rahim, recientemente nominado al Globo de Oro), se aprovechaba para sacarle todo el dinero que podía, así como usurpaba sus identidades con tal de seguir delinquiendo y seguir enriqueciéndose a su costa. La miniserie narra la caza de este criminal, y el relato de cómo cometió todos estos delitos. El estilo de narración de la serie puede despistar un poco cuando entras de primeras en la ficción, dado que alterna hechos del pasado de los protagonistas con eventos del punto que sitúan como presente, pero a medida que avanzan los episodios te vas acostumbrando, porque al final no dejan de ser como simples flashbacks que hemos visto en muchas otras producciones. No obstante, está todo sumamente cuidado y la forma de hilar los eventos durante los ocho capítulos que la componen es bastante atractiva, y logra que quieras estar atento para no perder detalle de lo que va pasando. 

Además, destacaría también el manejo de la tensión, como sucede en el 1×03, que logra transmitir el desasosiego y la incomodidad a la perfección, mientras se van desarrollando los acontecimientos. No solo eso, el elenco está elegido con mimo y gusto, y pondría un nombre por encima del resto: el papel que desempeña Jenna Coleman en The Serpent como Monique, la compañera criminal de Sobhraj. La ex companion en Doctor Who, o la reciente Reina Victoria en la serie sobre la monarca inglesa se luce en su rol, siendo uno de los personajes más interesantes y con más matices de toda la producción, sino el que más, ayudado gracias a la gran labor de la actriz.

Para aquellos que os la habéis perdido, deciros que ha sido una co-producción de la BBC con Netflix, así que lo lógico es pensar que, próximamente, la tendremos disponible en la plataforma, así que os recomiendo que no os perdáis esta gran miniserie, que ya pasa a ser de lo más relevante en el año seriéfilo, in my opinion.

Lo Mejor del Mes para María

Lupin

En principio, la idea de una revisión de la obra de Maurice Leblanc pasada por el filtro del siglo XXI me pareció bastante irritante. Pero Netflix ofrece un formato cómodo, la plataforma funciona bien y sabía que en algún momento terminaría cediendo a verla. Leí alguna crítica positiva y me llegó la sensación de que en general la percepción del público era muy buena.

Con esto de las historias clásicas sucediendo en tiempo moderno es inevitable pensar en Sherlock. Es un modelo de ficción que a veces funciona bien y otras veces no tanto, obviamente se nos viene a la mente el ejemplo de la serie brillante de la BBC, pero para mí no era suficiente,  porque mi relación con Arsenio Lupin es mucho más profunda que mi relación con Sherlock Holmes, un personaje mucho más conocido en la cultura popular, pero que, quizás precisamente por eso, nunca sentí como parte de mí.

Y por todo esto me costaba mucho esfuerzo acercarme a la serie de Netflix, teniendo el recuerdo de unos cuantos libros que disfrute enormemente durante mi adolescencia era difícil que la serie me gustase. Lupin es un personaje fascinante y algunas de sus aventuras y diálogos aún perduran en mi memoria muchos años después. Por todo eso empecé a ver la serie con la sensación de que probablemente no iba a gustarme pero enseguida me di cuenta de mi error, los guionistas son fans de Maurice Leblanc y se nota. La serie es una celebración de las novelas no adaptándolas de forma literal sino haciendo a sus personajes fanáticos de ellas. George Kay y François Uzan son los creadores de esta serie sobre un tipo que se gana la vida de la misma forma que Arsenio Lupin (es decir, es un ladrón de guante blanco) y que es admirador del personaje literario.

El homenaje que se hace a las novelas del caballero ladrón no es mediante una adaptación de las mismas sino de una forma mucho más original y directa: varios personajes son unos apasionados de la obra de Leblanc, hasta el punto de estar obsesionados y así la trama de la serie recorre la obra del autor mediante una historia paralela que ocurre en la actualidad y aunque los paralelismos son obvios, la forma en la que todo sucede y se enreda es tan elegante y bien escrita que en ningún momento pierde verosimilitud.

Omar Sy (cuyo trabajo más conocido es en la aclamada y preciosa Intouchables) interpreta a Assane Diop, que es el protagonista y que carga la totalidad del peso de la serie. Y Assane Diop es un tipo increíble y tiene el mismo carisma que el Lupin de los libros que tanto le gustan. En los primeros diez minutos ya nos ha conquistado con una personalidad y una inteligencia brillante que harán que nos enganchemos a esta entretenidísima serie.

Lo Mejor del Mes para Víctor

The Expanse

Para empezar este 2021 me he quedado con una serie que, ahora mismo, encabeza un género, que si no llega a ser por el resurgimiento de la saga de Star Trek estaría bastante desierto actualmente. The Expanse fue una apuesta algo arriesgada por parte de la cadena Syfy por intentar otra gallina que le diera huevos de oro como ya consiguiera antaño con la excelentísima Battlestar Galactica; aunque no le salió muy bien ya que tras su tercera temporada anunciaba que no la iba a seguir produciendo, incluso cuando la serie estaba siendo muy bien valorada por la crítica. Por suerte para nosotros, el odiado por muchos, magnate dueño de Amazon, Jeff Bezos, declarado fan de la saga literaria de donde procede la base para esta serie, se sacudió un poco el bolsillo y con la calderilla que debe tener en ellos se lanzó a rescatar la serie para su plataforma de streaming de Amazon Prime. Ello no solo proporcionó un aumento del presupuesto, sino una confianza a los productores de la serie para que ya se metieran de lleno a contar lo que querían sin tener que hacer malabares contentando a todo el mundo.

Durante esta quinta temporada hemos tenido otro cambio de escenario respecto a la genial cuarta, volviendo a nuestro sistema solar tras lo vivido más allá del anillo. Ha hecho acto de presencia un personaje que cogería la bandera de antagonista, haciéndose claro merecedor de ella durante toda ella. Marcos Inaros se encargó de poner en aprietos tanto a las Naciones Unidas Terrestres como a la República Marciana, mientras la Rocinante intentaba poner fin al terrorista cinturano. Otro detalle de la temporada es como diferentes tripulantes de la Roci vivían sus propias aventuras. Teníamos a Amos sobreviviendo en la Tierra al caos provocado por Marco, Avasarala haciendo lo que mejor sabe, Alex y Bobbie lanzados por el espacio, Jim Holden en la Roci intentado superar cada problema que le iba surgiendo y sobre todo, para mí el mejor personaje de la temporada ha sido Naomi Nagata, teniéndose que enfrentar con un pasado que había dejado de lado, llegando hasta el límite para intentar acabar con la amenaza, incluso teniendo que renunciar a lo que más quería para lograrlo. Todo ello entrelazado de una forma que no apenas dejaba que parpadeases.

Estábamos ante la penúltima parte de la serie, ya que con su sexta llegará la conclusión y por fin veremos cómo acabará todo. Una serie que está ocupando un vacío que reclamábamos hace tiempo y que por fin podemos disfrutar sin miedo a que nos dejen tirados en el medio del espacio.