Lo Mejor del Mes: del 1 al 31 de agosto

Lo Mejor del Mes: del 1 al 31 de agosto

Agosto mantiene la tónica anual: Netflix domina, y tiene pinta de que continuará presente en nuestra sección en la última parte de 2019. Con cuatro ficciones incluidas en este artículo, tres de las mismas son del gigante de streaming. GLOW, Mindhunter y Dark Crystal: Age of Resistance serán las representantes de Netflix este mes, y de ellas nos hablarán Iván, María y Víctor, respectivamente. Solo una queda al margen de este servicio, Animal Kingdom, la elegida por Daniel, que despidió en agosto su cuarta entrega y regresará el próximo año. Debajo tenéis las opiniones de cada uno.

Lo Mejor del Mes para Daniel

Animal Kingdom

La despedida de Animal Kingdom de este 2019 ha sido por todo lo alto. Con una entrega diferente desde el principio, al haber introducido por primera vez los flashbacks, todas las miradas estaban puestas en Smurf y en su devenir en la serie, y el cierre de la entrega ha respondido a las expectativas, sobre todo con un episodio, el 4×12, a la altura de lo mejor emitido en toda la serie, porque la situación lo requería.

Smurf ha sido el mejor personaje de la ficción, más allá de la interesante evolución de J durante estas cuatro temporadas, o Pope y sus problemas mentales que tanto juego dan. Por ello, merecía un homenaje como lo ha sido este cuarto año de serie, en el que no ha ocupado tanto tiempo de pantalla en el presente, pero se ha compensado con conocer más de su pasado, aunque más o menos teníamos todos una idea de lo que había sucedido. Además, me gusta que hayan sido útiles porque, al margen de darle más trasfondo a su personaje, los han conectado directamente con la resolución de la temporada, por lo que eso siempre suma; no todas las series saben utilizar bien esos vistazos al pasado, y Animal Kingdom lo ha conseguido.

Sinceramente, no sé cuánto tiempo más extenderán la serie tras lo ocurrido en esta cuarta temporada, pero sí tengo clara una cosa: Animal Kingdom sigue siendo una de las series más entretenidas de los veranos, y os la recomiendo a todos. Vale la pena conocer a los Cody.

Lo Mejor del Mes para María

Mindhunter

Durante la primera temporada conocimos a Holden y asistimos a su crisis de ansiedad, su complicada vida sentimental o la extraña forma que tiene de enfrentarse al mundo, durante la segunda temporada lo hemos dejado un poco abandonado y aunque su vida sigue siendo interesante, todo se ha resumido en que se medica para tratar la ansiedad y en que sigue siendo el mismo joven obsesivo de siempre.  En la segunda temporada el protagonista ha sido Bill, un hombre que divide su tiempo entre un drama familiar y un trabajo realmente dramático, de manera que mientras explora la mente de asesinos brutales siente que quizás tiene a uno de esos depravados mucho más cerca de lo que le gustaría. En parte creo que la trama del hijo de Bill resta puntos porque le falta credibilidad, ya que es demasiada casualidad que un hombre que vive rodeado de atrocidades se encuentre con una atrocidad en su propia casa. Ahora bien, los momentos en los que Bill va descubriendo la personalidad de su hijo comparándola con la infancia de sus entrevistados es de lo más curioso y nos deja preguntándonos si los psicópatas nacen o se hacen.

Creo que para cualquier actor debe ser una gozada interpretar a uno de los asesinos entrevistados en esta serie, durante la primera temporada asistimos a entrevistas realmente escalofriantes y aunque era difícil, en la segunda se ha mantenido el nivel de estos perturbadores encuentros en los que hombres malvados se muestran cuerdos, dementes, razonables o irracionales, pero donde siempre nos sorprenden con unos diálogos espeluznantes.  Afortunadamente volvemos a ver a Ed Kemper, que comparte episodio con el célebre Mason, pero hay tantos y tan interesantes villanos, que ninguno destaca sobre los demás.

Mindhunter es una de las apuestas más sólidas de Netflix y si el año pasado se centró en los orígenes de la Unidad de Ciencias del Comportamiento, esta vez ha tratado de la consolidación de la unidad del FBI, los asuntos más personales de Bill, algunas entrevistas y sobre todo un caso que ha sido tratado con especial detenimiento, el caso real de la desaparición de 29 niños en Atlanta en la década de los setenta. El asunto se trata con muchísima elegancia, insertando los conflictos raciales y de clase en la América de mediados del siglo XX.

Lo Mejor del Mes para Víctor

Dark Crystal: Age of Resistance

Ha sido un mes bastante parco en series, como viene siendo habitual en los veranos, y normalmente durante esta estación el escoger series suele estar balanceado entre elegir a la menos mala o encontrarte una joya veraniega. Por suerte estamos ante el segundo caso con la serie de Netflix: Dark Crystal: Age of Resistance, que en otras fechas disputaría sin muchos apuros el privilegio de estar en esta sección.

En 1982 se estrenaba Cristal Oscuro (The Dark Crystal), obra del ya hace tiempo fallecido Jim Henson (Padre de los Muppets, Teleñecos aquí en España). Por aquel entonces no fue bien recibida, debido sobre todo a ese toque tan oscuro y alejado del tono infantil que rodeaba su obra anterior, eso no evitó que se convirtiera en película de culto y años después recibiera el reconocimiento que se le debía. Ha pasado mucho hasta que, tras varios proyectos fallidos para volver a este universo, ha sido Netflix la que se ha llevado el gelfling al agua. Sin ya Jim Henson para sacar adelante el proyecto, su ausencia ha sido bien suplida por sus hijos, que han mantenido a flote, más que sobradamente, la obra de su padre durante todos estos años.

La serie expande el universo de Thra (el planeta donde se desarrolla la historia) de forma magistral desarrollando una mitología que en la película no pudimos apenas vislumbrar por cuestiones de tiempo, y aunque existen algunas incoherencias narrativas que se han pasado por alto, o se han dejado a un lado por razones prácticas, la historia narrada hace que el sólo hecho de crear la serie haya merecido la pena. Tanto a nivel técnico, el uso de marionetas potenciado con el nivel CGI actual (usado sólo cuando hace falta), como el nivel narrativo, la historia contada tiene mucho potencial como para desarrollarse durante temporadas, hace que la experiencia de la serie sea algo casi mágico. Esto sumado a unos personajes carismáticos, con voces puestas por actores de primer nivel, y con unos villanos bastante repelentes, consiguiendo en su conjunto que sea una serie redonda y muy disfrutable de ver.

Lo Mejor del Mes para Iván

GLOW

Debo decir que este mes ha sido complicado, ya que hemos podido disfrutar de muchas series a un nivel bastante alto y siendo curiosamente la mayoría de Netflix; pero como sólo puedo decidir una y para algo tengo compañeros en el blog, hablaré de uno de mis ojitos derechos de la plataforma: GLOW. Generalmente otros años le he dedicado un artículo directamente a la temporada de turno, pero en esta casi que he preferido hablar de ella en sección al no poder añadir nada más que no haya comentado sobre ella en entradas anteriores del blog. 

GLOW es una serie que te hace amar a sus personajes y mientras los arcos y la evolución de esto se mantenga en una línea coherente, pocas cosas pueden hacer que baje su nivel; pues bien, aunque no haya mejorado lo visto en el pasado en la propia serie, tampoco lo ha empeorado siguiendo la misma estela de sus entregas anteriores manteniendo ese “más de lo mismo” pero acertando a la hora de desarrollar nuevas tramas y conflictos dentro de la ficción. Y si esta repetición funciona, es gracia a todo ese magnífico cast que tiene, encabezado por Alison Brie, hace una labor encomiable que permite sentirte cada vez más cercano a todos estos personajes.

No me sorprende que durante esta nueva temporada GLOW siga demostrando que pese a estar a la sombra de otras muchas, es de lo mejor que tiene su plataforma de streaming en el catálogo. Pocas series pueden pegar mejor en esta sección, ya que es de aquellas en las sólo recuerdas los buenas que son cuando están emisión (Aunque a Mindhunter le pase algo parecido, aunque creo que en eso tiene parte de culpa la espera entre temporadas).